Rosario Central pierde en el Gigante de Arroyito ante el puntero Independiente con un equipo alternativo ya que guarda a los titulares para la revancha ante Bragantino en Brasil por la Copa Sudamericana, partido en que deberá dar vuelta el duro revés de la ida. Los dos goles del Rojo los anotó su delantero, Silvio Romero.

El primer tiempo no mostró un claro dominador, a pesar de que las pocas claras las tuvo Independiente.

Central no jugó una mala primera parte, tuvo bastante la pelota, pero no fue creativo en los últimos metros y no generó ninguna situación de gol. Solo un buen remate de Luques desde muy lejos, que contuvo Sosa.

El Rojo no fue superior al Canalla, ni mucho menos, pero aprovechó un descuido del conjunto rosarino para hacerse de la primera mitad. En una dividida en mitad de cancha, Independiente rechazó, la defensa canalla se quedó protestando, y la pelota le quedó a Alan Velasco, que hizo una increíble jugada personal, dejó en el piso a Broun, y dejó solo a Silvio Romero para que ponga el 1 a 0.

Después de la apertura del marcador, Central no tuvo reacción, y a pesar de seguir teniendo la pelota, no inquietó en ningún momento al arquero uruguayo.

Cuando se jugaba el último minuto agregado, el equipo del Kily González quedó mal parado, y, otra vez, Romero en conducción, definió pinchándosela a Fatura Broun. Golazo y 2 a 0.

El segundo tiempo comenzó con un Central que parecía decidido a ir por el empate, pero el entusiasmo duró poco más de diez minutos. El Canalla fue cayendo poco a poco, e Independiente durmió el partido en los pies de un Alan Velasco que la rompió toda.

Independiente, conforme con el resultado y con el partido planchado, tuvo un minuto de desorganización que aprovechó a la perfección el ingresado Ignacio Russo, que con un remate desde muy lejos la puso al lado del palo para meter en partido al Canalla.

Sin embargo, los últimos minutos, Central los pasó metiendo centros al área rival, y no llegó a contar con chances para empatar. Ahora deberá dejar todo para pasar en Sudamericana, porque ya el torneo se le ha hecho cuesta arriba.