Rosario Central firmó su primera victoria de visitante en lo que va de la actual temporada. El Canalla, que se hizo fuerte en el torneo en el Gigante de Arroyito, consiguió sumar de a tres fuera de casa ante un bastante flojo Huracán, que dominó la pelota, pero en ningún momento el juego.

Luego de partidos en los que se vio un nivel bastante irregular, el equipo de Miguel Ángel Russo encontró, con un pequeño cambio de esquema, un equilibrio que no había mostrado en lo que va del campeonato, más allá de algunos buenos minutos ante Tigre y Arsenal.

Central golpeó rapidísimo ante el Globo y quizás eso fue algo determinante para el desarrollo del encuentro. Haber tenido la efectividad de llegar una vez y anotar no es un detalle a dejar pasar. Ignacio Malcorra, que venía de varios partidos a un nivel bajo - incluso Russo lo sacó en el entretiempo ante Unión - dibujó una jugada extraordinaria y abrió el partido con un golazo.

Además, en el segundo gol armó todo sacándose un hombre de encima para dejar a Alejo Veliz solo, de cabeza, frente al arquero rival. Gol y asistencia para el volante que, en caso de estar en buen nivel, es fundamental en el esquema del conjunto rosarino.

Más allá de la eficacia de cara al gol, algo que no aparecía en los partidos anteriores ya que al Canalla le costaba mucho marcar, se vio un equipo afirmado en cancha, entendiendo cuándo debía arriesgar de más, cuándo debía cambiar el ritmo, y también cuándo debía cuidarse en el fondo.

La dupla de Facundo Mallo y Carlos Quintana se ha mostrado cada vez más segura con el paso de los partidos, y la sorpresa de Komar este lunes le vino muy bien al equipo. Se lo vio atento y rápido para salir al cruce cuando fue necesario.

Por otro lado, luego de la expulsión ante Sarmiento que lo dejó en el ojo de la tormenta, Kevin Ortíz fue de las figuras en el Ducó. El juvenil borró su error y lo hizo con creces: se adueñó del mediocampo junto a Montoya, ocupó perfectamente los espacios, tapó los huecos, y jugó simple cada que pudo, dándole fluidez al equipo.

Lo cierto es que Central logró, ante Huracán, algo que no había logrado en todo el campeonato: equilibrio. Lo compacto que se mostró en defensa, sumado a la efectividad mostrada en ataque saliendo de contra, con un Veliz que aguanta todo, un Malcorra intratable, y un Jaminton Campaz que intimida cada vez que la agarra, el Canalla mostró sus mejores armas a falta de una fecha para el clásico con Newell's, que es, como siempre, el partido que el hincha, y sobre todo Miguel Ángel Russo, quiere ganar.