Newell's pierde por 2 a 1 ante Godoy Cruz en un partido que cambió luego de la expulsión de Guillermo Balzi al comienzo del encuentro. A pesar del golazo de Pablo Pérez, la Lepra no pudo hacer nada con ese hombre de menos.

El partido comenzó con acción rápida, y el Tomba se puso arriba en el marcador a los dos minutos de juego. Martín Ojeda encaró para el medio y definió cruzado para poner el 1 a 0.

Sin embargo, cuando parecía un arranque complicado para los de Sanguinetti, rápidamente apareció Pablo Pérez, se dibujó una tijera desde afuera del área y la clavó al ángulo, travesaño y adentro, para empatar el encuentro.

Tweet de Pablo Giralt

Con el partido mucho más parejo, y un Newell's que de a poco se afianzaba, a los 20 llegó la expulsión de Guillermo Balzi, que metió un planchazo tremendo. A pesar de no ir con la intención de lastimar, Herrera decidió, después de consultar con el VAR, echar al juvenil.

A los de Sanguinetti les costó mucho jugar con ese hombre de menos, y a pesar de que el Tomba no inquietaba, tenía la pelota y no le daba chances a los rosarinos.

El comienzo del segundo tiempo llegó con un visitante decidido a aprovechar esa supremacía numérica, y a atacar a Newell's.

La Lepra aguantó todo lo que pudo, y después de quedar mal parado en muchas ocasiones, le dio la oportunidad al Tomba de volver a adelantarse en el marcador.

La visita salió rápido de contra, quedó 3 contra 1, Ojeda habilitó a Larrosa, y este encontró a Ramirez que, solo y sin arquero, puso el 2 a 1.

Al rojinegro le costó mucho reaccionar, y sufrió en todos los aspectos la falta de un hombre. No pudo afirmarse en defensa, y tampoco generar en ataque, a pesar de lo cambios con los que Sanguinetti quiso cambiar el rumbo del encuentro.

Los últimos minutos quedaron en lluvia de centros de los pibes, que lo intentaron hasta el final, pero no alcanzó para volver a poner las tablas en el marcador.