El pasado 15 de noviembre, Barracas Central le ganó a domicilio 3-1 a Villa Dálmine, que venía de ocho partidos sin perder, y se metió en la final por el primer ascenso a Primera. Sin embargo, apenas finalizó el duelo en Campana, comenzaron las acusaciones de quienes aseguraban que el Violeta había resignado el triunfo para darle una mano al Guapo, que luego terminó cayendo 1-0 ante Tigre, campeón de la Primera Nacional.

En ese contexto, y tras el escándalo que sigue vigente e incluso derivó en el comienzo de una investigación judicial, el mencionado club decidió dejar libres a 16 futbolistas, casi una lista de concentrados entera. La determinación fue oficializada a través de un comunicado emitido desde las redes de Dálmine.

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Respecto al partido con Barracas Central que desató la polémica, seis de los once titulares fueron desvinculados del club: Bilbao, Rizzi, Romero, Cáceres, Pollacchi y Gagliardi. Además, Santiago Moyano y Lucas Cajes ingresaron en la segunda mitad y también sufrieron la finalización de su contrato. Aquellos que fueron desde el arranque en la última fecha y todavía siguen en el plantel son Emiliano Agüero, Ezequiel D’Angelo, Lautaro Díaz, Francisco Nouet (autor del único gol ante el Camionero) y Gastón Díaz.

En su momento, el entrenador Marcelo Franchini confesó que “el último día de entrenamiento había un malestar dentro del grupo” y por eso dio por finalizado el ciclo 2021 de prácticas. “Se habla y se habló mucho sobre esas situaciones. Fue una semana muy complicada. La verdad, lastima mucho. Sobre todo cuando desde mi lado y del cuerpo técnico hay mucha seriedad y profesionalismo″, agregó al respecto de su decisión. Su contrato finaliza en marzo de 2022 y planea reunirse con la CD para evaluar con qué plantel podrá contar y si seguirá al frente del primer equipo.