Luego de proponer que las entidades deportivas puedan asumir la figura legal de Sociedades Anónimas Deportivas (SAD), ahora el presidente Javier Milei suma una nueva polémica vinculada a los espectáculos y sobre todo del fútbol. En la llamada Ley Ómnibus, el libertario propone la despenalización de lo que hoy es un delito: la reventa de entradas.

"Las entradas deportivas pueden ser revendidas sin límite de las veces que pueda realizarse dicha operación", destaca la primera frase del artículo 48 bis de la Ley 23.184 de Espectáculos Deportivos, que pretende modificar para permitir la comercialización de tickets.

Asimismo, la normativa establece que "el encargado de ventas de entradas no podrá imponer restricciones a dicha reventa". "En los casos de entradas nominativas el encargado de ventas de entradas deberá permitir la reventa a través de un mecanismo electrónico", agrega el texto presentado y que debe ser aprobado por el Parlamento.

Por último, la iniciativa señala que "para las ventas a través de dicho sistema las entidades deportivas podrán cobrar una comisión que no supere el 5% del precio acordado, pero no podrá limitar sus precios".

En la actualidad, las penas establecidas por revender localidades van desde una sanción económica de $2.000 a $30.000 o dos días de arresto.