Nadie se quiere perder el Mundial de Qatar por eso todos los jugadores pisan con pie de algodón. Nadie quiere que le ocurra la desgracia de Paulo Dybala. El ejemplo más claro es el de Lionel Messi, que junto a su equipo médico elaboran cuidadosamente los tiempos de recuperación de una molestia física que lo incomoda.

Esta vez decidieron que lo mejor es que siga sin entrenarse con PSG y hasta no lo citaron para jugar ante Benfica por la Champions League, que se disputará este martes a las 16, en París.

Tras el partido de ida con Benfica del cual salió luego de tocarse la pierna, se conoció que el capitán de la selección de la Argentina sufrió una sobrecarga en el gemelo pero que no alcanzó a ser un desgarro. El sábado pasado no jugó por la liga francesa ante el Reims.