Real Madrid y Milán tiraron la historia a la cancha y se clasificaron a las seminales de la Champions League 2023, al eliminar este martes a Chelsea y Napoli, respectivamente, en los partidos de vuelta de los cuartos de final.

Real Madrid, que va por la 15ta. "orejona", venció de manera contundente por 2 a 0 a Chelsea, donde fue titular el argentino Enzo Fernández, en un partido disputado en Londres, en el estadio Stamford Bridge. Con el doblete de Rodrygo, el resultado global quedó 4 a 0 a favor de los dirigidos por Carlo Ancelotti.

En tanto, en el estadio Diego Maradona de Nápoles, el local y Milán empataron 1 a 1, con goles del francés Olivier Giroud para los Rosoneri, y del nigeriano Víctor Osimhen para los del sur. El encuentro tuvo la particularidad de que los arqueros de ambos equipos atajaron un penal cada uno. Con este empate, el resultado global quedó 2 a 1 a favor del norte de Italia.

Este miércoles, Bayern Múnich-Manchester City e Inter-Benfica, definirán a los otros semifinalistas de este atrapante torneo, con la esperanza de que haya clásico italiano.

Real Madrid jugó de manera inteligente, espero unos metros atrás para poder contraatacar y pasarle la responsabilidad de marcar goles a un Chelsea que con el paso de la temporada dejó en evidencia que le faltaron refuerzos del medio para adelante, como lo marca su actual posición en la Premier League.

El italiano Carlo Ancelotti dispuso al mediocampo titular compuesto por el croata Luka Modric, el alemán Toni Kroos y el uruguayo Federico Valverde.

Los dirigidos por el "interino" Frank Lampard se hicieron cargo de la responsabilidad de tener que dar vuelta un 2 a 0 y comenzaron a atacar al Madrid, pero solo encontraron resquicios por el ala izquierda donde se aposentaba Édouard Camavinga.

Cuando recuperaba la pelota el Madrid salía rápido con pelotazos para Vinicius y Rodrygo que desarmaba a toda la defensa Blue con su velocidad y su gambeta. Ante estos embates, el arquero vasco Kepa Arrizabalaga evito que la llave se cerrará en el primer tiempo.

Por el otro lado, Thibaut Courtois puso la cara hacia el final del primer tiempo y le trajo tranquilidad a Ancelotti.

En el segundo tiempo, a los 13 minutos, el espíritu copero "Merengue" salió a relucir y Rodrygo, luego de una combinación con Vini, rompió el empate en el marcador.

El 3 a 0 en el resultado global significó el fin de la llave, y Ancelotti cuidó a sus figuras, mientras que Chelsea movió el banco buscando un cambio pero de poco sirvió, porque a los 35, luego de una gran jugada colectiva, Valverde, se sacó dos jugadores de encima dentro del área y se la sirvió a Rodrygo para que marcara su doblete, y despejará cualquier posibilidad de recuperación de los londinenses.

Simultámente, en el estadio Diego Armando Maradona, Milán impuso su tradición copera al obtener un 2 a 1 en el resultado global, luego del empate de este martes.

Milán tuvo un buen arranque ya que el portugués Rafael Leao recibió una pelota y se metió en el área napolitana, corrió en paralelo a la línea de gol, cuando recibió una embestida que el árbitro sancionó como penal. El francés Olivier Giroud ejecutó la falta, pero Alex Meret, arquero de los celestes, voló hacia su izquierda y desvió el remate.

Pero Milán marcó diferencias gracias a la fuerza y la potencia de Leao que en el minuto 42 tomo una pelota en su campo y corrió 70 metros, sacándose defensores de encima, como si fuera una carrera de postas y cuando llego al área se la sirvió al punto del penal al goleador Giroud, que definió con mucha calma.  

El Napoli buscó achicar las diferencias, pero se encontró con una muralla que había armado el técnico milanista Luciano Spalletti. Finalmente, a los 37 minutos de la segunda etapa, el arbitro cobro penal, luego de una mano de un defensor de los "Rosoneris".

La falta la ejecutó el georgiano Khvicha Kvaratskhelia, pero el guardameta francés Mike Maignan voló a su izquierda y bloqueó la trayectoria de la pelota.

En el segundo minuto adicionado, cuando Napoli era un malón que tenía sitiado en su área al Milán, el nigeriano Victor Osimhen cabeceó un centro y lo envió al fondo del arco para igualar el partido.