Ricardo Centurión tiene su destino futbolístico sellado, ya que en junio próximo quedará fuera de Racing y seguramente, como anunció el presidente del club, Víctor Blanco, continuará su carrera en el exterior, pero el triste final en la "Academia" lo encontró hoy, a un día de celebrar el campeonato de la Superliga, respondiéndole con una carta de un hincha que lo defendió tanto al técnico Eduardo Coudet como a aquellos que anoche lo silbaron en el Cilindro de Avellaneda.

Centurión no estuvo entre los invitados a la fiesta del campeón pese a haber formado parte del equipo que se consagró en la penúltima fecha, una antes del partido de ayer ante el subcampeón, Defensa y Justicia, pero igualmente, cuando fue mencionado como parte del plantel durante la celebración, los hinchas le dedicaron una estruendosa silbatina, a la que respondió con un mensaje en su cuenta de Instagram: "No todos, pero el 90 por ciento me quiere".

Y luego aprovechó una carta que por esa vía publicó un hincha que le dijo: "Yo no te chiflo, sos un genio", para replicarla y direccionarla hacia el "Chacho" y sus denostadores de este domingo.

El texto en cuestión decía lo siguiente: "Qué triste que silben a un bicampeón, a un pibe que se crió en el Tita -por el predio de Inferiores Tita Mattiussi-, les molestó que se les pare de manos al jefe cuando se sintió que lo estaba verdugueando. Ustedes seguramente hubiesen entrado cabizbajos, siendo más hipócritas que él".

"Seguramente más de una vez se equivocó en su vida privada, pero profesionalmente siempre rindió al 100 por ciento. Claro, pero ustedes son ejemplo. Laburan bajo patrón, se escabian todo el fin de semana, hacen pasar necesidades a la familia, y sienten la humillación como algo natural. Esa misma rebeldía, esa personalidad a veces lo lleva a equivocarse, y fue la misma que lo llevó a entrenar cuando ya no tenía ganas, que disimulaba las lágrimas de no poder compartir con sus amigos, como cualquier chico normal", agragó.

"Fue la misma personalidad que lo llevó a ser el hombre de la casa, siendo una criatura. No tenía papi que le regale cosas, tenía una madre que laburaba 12 horas para llevar el morfi. Por favor, Wachin, no cambies nunca, en todo se puede mejorar. El querer cambiar te va a convertir en un hipócrita como el resto. Y ustedes, ejemplo de vida, de vez en cuando es más saludable barrer su propia vereda que la ajena", concluyó.