Boca Juniors alcanzó esta noche los cuartos de final de la Copa Libertadores, instancia en la que enfrentará a Racing Club, al cabo de un partido que sufrió en demasía, primero en el juego y después porque perdió por 1 a 0, el mismo resultado con el que había ganado en la ida en Porto Alegre ante Inter, y que por ello lo derivó a la definición por tiros penales que se terminó adjudicando por 5 a 4.

El encuentro ya empezó con malos augurios para Boca, porque apenas al minuto ya hubo un tiro en el travesaño de los brasileños que hacían presentir una noche difícil para los "xeneizes".  Apenas comenzado el segundo tiempo una fatalidad iba a complicar esa seguridad que contenía a los dirigidos por Miguel Ángel Russo: el lateral izquierdo Frank Fabra cerró un centro rasante desde la izquierda tras una marcación deficiente del otro marcador de punta, Julio Buffarini, y en última instancia terminó empujando la pelota a la red.

Después de algunos intentos, los visitantes notaron el cansancio, pero Boca no aprovechó la circunstancia. Los penales terminaron siendo para el local, aunque Cardona erró el segundo y complicó temprano la definición. Ahora, espera Racing.