Una nueva edición del Fondo de la Amistad partirá –con todos los protocolos sanitarios del caso– este domingo 7 a las 6 desde el Monumento Nacional a la Bandera hasta el Campo de la Gloria, en San Lorenzo. Una prueba de trote no competitivo que ya lleva 19 años y que en 2020 reunió a unos 300 participantes que unieron los 27 kilómetros entre salida y llegada.

La convocatoria es abierta, sin cargo, no es organizada por empresas, ni con intervención del municipio, por lo que el tránsito no estará cortado. Sí está previsto que haya acompañantes en bicicletas y vehículos para asistir en lo que se requiera, y habrá puestos en los que los atletas podrán cargar agua en sus propias botellitas o mochilas de hidratación.

En diálogo con Rosario Plus, la ultramaratonista Analía Razetto explicó que llaman a participar con distanciamiento social y tienen previstas varias medidas para cumplir con  los protocolos, como llevar barbijo los primeros 400 metros y al llegar a la meta, y una largada en tandas. “Se le pidió a la gente que lleve barbijo y una bolsita, porque el barbijo sirve en tanto no esté mojado. Así que en la largada van a estar todos con barbijo. Vamos a ir largando cada 10 segundos hileras de 10 personas o 20 personas, dependiendo la cantidad que haya, cosa que se empiecen a separar. Se llevan el barbijo en la mochila o el cinturón de hidratación y después cuando llegan a San Lorenzo se lo ponen de nuevo seco”, detalló la atleta beltranense, que además invitó a llevar alimento para gatos y perros, gasas, vendas y elementos para curación de animales para donar a entidades protectoras.

Analía Razetto.
Analía Razetto.

La entrenadora del grupo Buscando +, que hace años se ocupa de la logística de este trote, también destacó que “los puestos van a ser de reabastecimiento, no de hidratación. Es decir, la gente no va a tener vasitos donde se va a compartir. Sí le pedimos a cada uno que lleve su equipo de hidratación para reabastecer. Va a haber cuatro puestos, en Rosario, en Granadero Baigorria, en Capitán Bermúdez y uno en Fray Luis Beltrán. Este va a tener también fruta a cargo de la Municipalidad de Beltrán que vino de la mejor onda, y van a estar los bomberos asistiendo con agua por si hace mucho calor, tirando lluvia de agua”. El Municipio de San Lorenzo también colaborará con frutas en la llegada de los atletas a Campo de la Gloria.

Además de hacer foco en las medidas preventivas del COVID desde el grupo convocante como cada año pidieron que los corredores que tomen sus precauciones por el sol y el calor (gorra, pantalla solar y más hidratación). Es una prueba dura porque requiere estar entrenado para participar, y por las temperaturas que suele haber en Rosario los primeros días de febrero teniendo en cuenta que buena parte de los 27 kilómetros que se recorren son sobre la ruta 11 en tramos despejados, sin sombra. No hay inscripción previa, sino que en el momento por cuestiones de seguridad se toman los datos de los participantes.

Será seguramente un evento especial para el running de la zona después de casi un año sin carreras de calle, y va a ser una prueba de fuego para comprobar si se cumplen los protocolos con responsabilidad para que este tipo de actividades se pueda llevar adelante. Si bien esta no es una carrera, sí es una actividad que concentrará la atención de los corredores deseosos de una meta “no virtual”. 

Este fondo fue iniciado por un pequeño grupo de corredores en 2002 como entrenamiento para el Maratón Internacional de Rosario, los 42 km, y se fueron sumando participantes. Se realiza siempre uno de los primeros domingos de febrero, entre dos fechas históricas para la región y el país como son la Batalla de San Lorenzo (3 de febrero de 1813) y el primer izamiento de la Bandera (27 de febrero de 1812). Para recordar esos eventos el fondo larga en el Monumento Nacional a la Bandera, donde la enarboló Belgrano por primera vez, y termina en Campo de la Gloria, San Lorenzo, frente al convento San Carlos Borromeo, donde luchó el ejército del General José de San Martín.