Las grandes marcas de calzado deportivo venden millones de pesos de mercadería en el país, pero debido la disparada de los precios y los altos costos de sus materiales, un mercado pirata se está desarrollando de manera paralela, que también mueve una gran cantidad de dinero y que hace tambalear al mercado oficial.

Las marcas de las tres líneas y las de pipa son mayoritariamente las preferidas por todos a la hora de entrar a una cancha, pero muchos podrían ser víctimas de estafas, porque las copias son tan detalladas y tan bien hechas, que pueden despistar a cualquiera. Aunque también algunas personas eligen las “truchas” a sabiendas, porque no está dentro de sus posibilidades adquirir unas originales.

Muchas de estas ventas de zapatillas similares a las de alta gama se ofrecen por internet o a través de las redes sociales, algunas con una excesiva diferencia de precios, otras no tanto.

Aunque también, algunos jugadores amateurs que compraron calzado de marca en comercios habilitados, dieron cuenta de la escasa durabilidad de sus pares, debido a que a los pocos meses se les fueron despegando o dañando, lo que hace circular ese fantasma que no todo lo que “brilla es oro”.

Lo cierto es que por engañados, estafados o por conscientes de que se está accediendo a un par del calzado de dudosa procedencia, los resultados son para todos el mismo, lo rápido que se deterioran. Un vendedor pirata que tiene de la marca que le pidas -incluidas las del cocodrilo o las famosas por las carteras francesas- fue consultado por este medio y aseguró en relación a la calidad: “Duran lo que tiene que durar” y agregó: “tienen un precio accesible, además imaginate que nosotros tenemos que seguir vendiendo, cuando se rompen, nos compran otras. Es como un entendimiento recíproco entre vendedor y comprador”.

Mucho de este material ingresa de manera ilegal al país, aunque algunos aseguran que también hay de origen made in Argentina. Algunas de las grandes empresas lanzaron guías para ayudar a las personas a no ser estafadas y realizar una compra inteligente.

Entre los detalles a tener en cuenta a la hora de adquirir zapatillas de marca son: por un lado que la compra se realice en casas oficiales o con autorización para comercializar, que tengas sus carros de productos online vinculados a esos negocios habilitados. No comprar en puestos callejeros, ni aquí en el país, ni en el exterior.

Otra de las cuestiones a tener en cuenta, son el envoltorio y empaques del calzado. Cada caja cuenta con las especificaciones del modelo, además de un código que debe coincidir con el de las zapatillas que se pretende adquirir. También los modelos se pueden consultar en el sitio oficial de cada empresa o compararlos con una foto. En relación a las cuestiones estéticas y la calidad de sus materiales, todo desalineado, costura zigzagueada y rebarba o saliente de la suela, debe ser un llamado de atención.

La etiqueta interior de las zapatillas debe tener: código de serie único, materiales, país de origen, fecha de producción, código de barra o QR. En relación al calzado de tenis, algunos aseguran que es más fácil darse cuenta cuando le quieren “meter el perro”, debido a que aquí prácticamente solo se juega sobre polvo de ladrillo, por lo que los materiales son más suaves y no tiene que haber rebordes en las costuras y su suela espigada, no debería tener ningún relieve.

Los cierto es que más allá de todas las especificaciones que se puedan dar desde las empresas en cuento a la validación de sus productos, siempre hay que tener en cuenta lo que indica un viejo refrán: “Cuando la limosna es grande, hasta el santo desconfía”.