El Servicio Meteorológico venía advirtiendo lo que era sabido: tormenta eléctrica y torrencial para todo el fin de semana. Pero sobre llovido mojado, y a pesar del fuerte sol que acechaba este viernes al mediodía sobre la ciudad con 30 grados, unas nubes avanzaron sobre la ciudad y descargaron una tenue lluvia, como preanuncio de lo que parece será el fin de semana, justo en el umbral de la gran apertura de la 34º Encuentro y Fiesta Nacional de Colectividades. 

La costumbre popular rosarina le atribuyó esta coincidencia de la tormenta  con el tradicional festejo a un gualicho proveniente de la comunidad gitana, a la que nunca le dieron cabida en la organización del evento. Pero con mito o sin mito, este viernes a las 21 se encendieron las luces del escenario mayor con el Elenco de Prácticas Escénicas de Folklore del Instituto de Danzas Isabel Taboga, seguido de distintos bailes y espectáculos. Y así, Rosario vivirá una vez más su fiesta más convocante.

De esta forma, como cada año, las tradiciones, comidas, música y danzas de las naciones, quizás deban citarse en el Parque a la Bandera con un buen piloto y capucha o un paraguas, al menos durante este fin de semana.