La abundante e intensa lluvia que cayó sobre Rosario durante varias horas no impidió que Newell's y Defensa y Justicia jugasen su partido. El césped del Coloso Marcelo Bielsa, en muy buenas condiciones, se bancó el partido sin problemas.

Cerca de las seis de la tarde Mauro Vigliano recorrió el campo de juego y confirmó lo que a simple vista se notaba. El estado del terreno era óptimo más allá de que la ciudad soportaba ya varias horas de intensas precipitaciones. 

Luego el espectáculo se desarrolló con normalidad, aunque claro hubo barridas espectaculares y un poco más de pierna fuerte producto del agua. El canchero del Coloso fue una de las figuras de la noche.