El Centro Cultural Fontanarrosa inaugura este viernes a las 19 la muestra Revolucionistas, Rebeliones y Feminismos, ideada por el Centro de Estudios Latinoamericanos Ernesto Che Guevara (CELChe) de la Municipalidad, con curaduría de Sonia Tessa, Lilian Alba, Joaquina Parma Leiva y Romina Garrido. 

Revolucionistas emerge como la construcción de una propuesta estética y política que recupera una mirada feminista de la historia de Rosario. La muestra podrá visitarse, con entrada libre y gratuita, de lunes a domingos de 10 a 20 hasta el domingo 31 de marzo.

Fotos, instalaciones, obras de arte y documentos históricos son algunos de los materiales reunidos para dar cuenta de las identidades disidentes en las luchas populares de la ciudad y los grandes momentos históricos en los que surgieron estas rebeliones.

Como parte de la muestra, el CCRF tendrá una nueva denominación temporaria hasta el 31 de marzo: Centro Cultural Angélica Gorodischer. La escritora rosarina fue la personalidad elegida para renombrar al centro cultural, como primer señalamiento de un presente de saberes y experiencias situadas.

“Con este gesto, Revolucionistas quiere rendir homenaje a la escritura de las mujeres que han debido batallar durante siglos para tener el cuarto propio que les permita tomar su palabra. Elegimos a Angélica Gorodischer porque sus letras nos iluminan”, explica Pamela Gerosa, desde la coordinación del CELChe.

La cita inaugural será a partir de las 19 horas de este viernes y estará acompañada por la transmisión en vivo del primer programa de la octava temporada de "Juana en el arco" que se emite los viernes de 20 a 21, por Radio Universidad de Rosario, con la conducción de Virginia Giacosa y Sonia Tessa y en esta oportunidad, contará con la participación de Fernanda Blasco.

Espacios-tiempos de la muestra

En la primera sala se presenta un diálogo entre pañuelos verdes y blancos, que pone el foco en lo masivo, en las multitudes que hacen que un momento pase a ser histórico. Un dispositivo de imágenes translúcidas cobra fuerza cuando el cuerpo del visitante entra en juego. La marea verde es el territorio común al que abonan estos testimonios gráficos para que crezca algo nuevo.

En la segunda sala se disponen contenidos audiovisuales que tienen a las micro-resistencias como protagonistas. Ex presas políticas y mujeres feministas agrupadas en el colectivo Unidas, inician el debate sobre los temas que en distintos momentos históricos estuvieron al margen de toda agenda. En diálogo con este espacio, se levanta un gran mural de resistencias a las políticas neoliberales de los años´90 y las actuales.

El último salón que toma la muestra es el que refiere a las intersecciones. Lejos de plantear un cierre, está pensado para generar preguntas, evidenciar las ausencias, lo no dicho, los espacios vacíos, el no registro. Los anarquismos, el Rosariazo, la lucha de Madres y Abuelas de Plaza de Mayo y los Encuentros Nacionales de Mujeres son algunos de los hitos del Siglo XX que confluyen en el movimiento feminista hasta llegar a los días de manifestaciones a favor de la legalización del aborto frente al Congreso de la Nación.