De repente se vino el otoño a Rosario, con una mañana fresca, tanto que el abrigo liviano se mostró imprescindible. Aún es verano, sólo es un oasis para darle respiro a los rosarinos. Por la tarde, mucho sol y temperatura agradable.

Según el Servicio Meteorológico Nacional el cielo estará despejado con vientos leves o moderados del sector sur, lo que dará el fresquito matutino. Un abrigo fino para que el viento no pegue y moleste desde temprano.

Por la tarde las condiciones no cambiarán demasiado, aunque sí comenzará a levantar la temperatura. Si a las 7 eran 13 los grados que invadían la ciudad, a la tarde loa máxima será de 26. Agradable para andar de remera pero sin transpirar.

La semana será similar aunque de a poco la temperatura irá subiendo.