Franco Casco no murió ahogado en el Paraná. Esa hipótesis, que en un primer momento se planteó como oficial tras haberlo encontrado muerto en el río, se descartó gracias a un estudio realizado por la Universidad de Buenos Aires. Así lo confirmó a Rosarioplus.com el defensor público, Gabriel Ganón.

A partir de una muestra de la sangre del joven, se pudo determinar la no presencia de diatomea en sangre, un alga cuyos vestigios aparecen en el organismo cuando una persona fallece por ahogamiento. Este estudio fue solicitado por la defensa a la cátedra de Biología Marina de la Universidad de Buenos Aires.

“Esto no sólo confirma que Franco no murió ahogado, sino también que fue torturado y asesinado en la comisaría 7ma”, dijo Ganón. El libro de ingreso a la comisaría fue alterado y las suposiciones de que la policía intervino en su muerte se acrecentaron. En el momento en que trascendió que a Casco le armaron una causa por resistencia a la autoridad, es cuando el abogado y titular del Servicio Público Provincial de Defensa Penal, Gabriel Ganón, se estableció como abogado defensor. 

“Descarta absolutamente la versión que buscó la Provincia de hacerle creer a todo el mundo que murió ahogado. Incluso hubo negligencia del fiscal (Guillermo) Apanowicz, y también intención del ejecutivo provincial por hacer todo lo posible por encubrir el crimen”, afirmó vehemente Ganón.

La versión que sostienen desde la familia Casco, agrupaciones sociales y del mismo el defensor general provincial y que representa a la familia Casco, Gabriel Ganón, es que la policía intervino en su detención y posterior muerte, y que “nunca salió de la comisaría”. 

Es por eso que la causa fue pasada en noviembre de 2014 a la Justicia federal, ya que Ganón planteó que la investigación debe llevarse a cabo con la hipótesis de desaparición forzada de persona.

Franco Casco desapareció el 6 de octubre del año pasado. Días antes había llegado a la ciudad procedente de Florencio Varela para visitar a unos familiares. Pero al ser detenido en la calle, se lo trasladó a la comisaría 7ª. Después de varios días de búsqueda, se lo encontró muerto en el río Paraná.