La paralización de la planta de Oil Combustibles es un dolor de cabeza para la ciudad de San Lorenzo. Al margen del riesgo ambiental que implica el cierre de la ex Refinería San Lorenzo, las arcas del municipio de la ciudad donde hace dos siglos luchó San Martín pueden quedar en jaque si no se da una reactivación.

Es que Oil es “un contribuyente muy importante” para la Municipalidad de San Lorenzo, según reconoció el propio intendente Leonardo Raimundo, en diálogo con Ariel Bulsicco en Sí 98.9. El jefe comunal reconoció que la ex Refinería “es el principal aportante del municipio”.

Hay buenas razones para esta apreciación: Oil paga 4 millones de pesos mensuales en concepto del Derecho de Registro e Inspección (Drei) y la sola posibilidad de que esos dineros no ingresen más a las arcas comunales inquieta al intendente de la vecina ciudad. “Al municipio le genera una caída enorme de recursos fiscales”, dijo.

Claro que la crisis ya comenzó a tener efecto en la recaudación sanlorencina. Mientras la planta transita ya quince días cerrada y la angustia entre sus trabajadores crece, Oil Combustibles ya comenzó a incumplir con sus obligaciones tributarias para con el municipio. “Los tributos de este mes no se han pagado, están debiendo entre 3 y 4 millones de pesos por los impuestos de este mes”, alertó Raimundo.

La preocupación en el municipio sanlorencino va in crescendo a medida que se conocen más detalles de la crisis. “Por lo que sabemos, la situación financiera de la empresa es crítica”, indicó el intendente sanlorencino, quien resaltó también el impacto “social” del cierre de Oil. “No se pierden solamente las fuentes de trabajo directas, también hay un montón de empresas contratistas afectadas”, agregó.