El caso de la matanza de perros, envenenados con sebos arrojados en las calles de zona norte, tiene una testigo de identidad reservada y en base a la información que aportó la Fiscalía Regional trabaja para esclarecer la motivación y el responsable de los hechos ocurridos la semana pasada.

El pasado jueves se viralizaron a través de redes sociales, una serie de casos de perros envenenados en la zona norte de la ciudad. Todos los episodios registrados tenían dos coincidencias: la zona y el cuadro letal que presentaron los animales. A partir del hecho la Fiscalía Regional inició una investigación para poder dar con los responsables del hecho de maltrato animal y ya recabaron nuevos datos. 

Según informaron desde la Fiscalía a Rosarioplus.com este lunes en horas de la mañana se recibió una denuncia de una vecina de la zona de barrio Alberdi, que habría aportado nuevos datos a la investigación que la Fiscalía inició de oficio. La identidad de la denunciante fue preservada.  

También comunicaron que "ya se enviaron al Instituto Médico Legal (IML) muestras extraídas de los animales para realizar los exámenes médicos correspondientes", por lo que se aguarda el informe toxicológico para determinar el tipo de veneno empleado para la matanza.

Además se están relevando las imágenes tomadas por las cámaras de la zona y se realizaron una serie de entrevistas a los veterinarios que atendieron los casos de envenenamiento en primer lugar, para que den cuenta del cuadro que observaron y qué posibilidades de tratamiento tuvieron.

De descubrirse un responsable del hecho, según la ley 14.346 en la que se determina como delito los "malos tratos y actos de crueldad a los animales", será reprimido con prisión de quince días a un año. Pena excarcelable.