El Gobierno nacional continúa con su estrategia por contener el ingreso de la variante Delta mientras avanza la campaña de vacunación. Sin embargo, hay un problema que no logra ser resuelto y empieza a generar zozobra: la falta de segundos componentes de la Sputnik V. Así, completar el esquema vacunatorio pone una luz amarilla.

Este jueves desde Rusia confirmarán si enviarán a la Argentina un nuevo embarque de segundas dosis. La otra solución es esperar la producción local del Laboratorio Richmond del componente faltante, y, además, se siguen con atención los estudios para combinar distintos tipos de vacunas.

Segundas dosis, sin definiciones: sólo el 20% de los santafesinos completó el esquema

Los ministros de Salud de todo el país se reunieron el miércoles con su par nacional Carla Vizzotti y expresaron la necesidad de lograr soluciones para que la mayor cantidad de población completa la segunda dosis contra el Covid para enfrentar la cepa Delta que es más contagiosa. No hubo fechas precisas para el arribo de dosis Sputnik.

En Santa Fe solo el 20 por ciento de la población fue inoculada con la segunda dosis, según los datos del Ministerio de Salud provincial. Se trata de unas 430 mil personas de las 2.350.350 vacunadas. Ese porcentaje no es nada alentador para un eventual ingreso de la variante Delta.

Respecto a la posibilidad de completar con otras vacunas las Sputnik aplicadas que son las más demoradas, describe que se está al caer “información sobre un estudio de intercambio de Sputnik con AstraZeneca”, proveniente de Rusia. En Argentina se realiza el mismo estudio de intercambiabilidad de vacunas en Ciudad de Buenos Aires, Provincia de Buenos Aires, San Luis, Mendoza y Córdoba. “La semana que viene tendremos novedades”, adelantó.

Respecto de los plazos de aplicación de segundas dosis, el ministerio provincial  insistió en respetar los intervalos de ocho semanas para la vacuna AstraZeneca y de tres a cuatro, para la Sinopharm. 

Como si fuera poco hay un dato que suma pólvora: los menores de 18 años no recibieron ni una sola inoculación ya que en el país no hay ninguna vacuna aprobada para esta población. La vacuna Moderna, donada por los Estados Unidos, podría llenar ese casillero pero se está esperando el visto bueno de la Administración de Medicamentos de Estados Unidos para su utilización .