El policía que resultó baleado el viernes tras una violenta salidera en Fisherton continúa internado en terapia intensiva y presenta lesiones neurológicas "graves". Así lo informaron desde el Hospital de Emergencias Clemente Álvarez. Por el hecho aún no hay detenidos.

La directora del HECA, Andrea Becherucci, explicó que el agente, que desarrollaba tareas en General Lagos y hacía adicionales en la distribuidora de golosinas, continúa internado en terapia intensiva con asistencia mecánica ventilatoria y con pronóstico “muy reservado”. “Tiene lesiones neurológicas graves. Hay que esperar día a día para ver cómo va evolucionando”, indicó.

En este sentido, detalló que la víctima presenta una lesión transfixiante en el cráneo, “esto quiere decir que el proyectil ha provocado lesiones hemorrágicas y traumáticas que comprometen zonas vitales del cerebro”.

“Él está en coma, se lo está sosteniendo desde el punto de vista hemodinámico y respiratorio. No tiene muerte cerebral, tiene una lesión neurológica aguda grave, compleja. También tiene una lesión en tórax que si bien es compleja, no le condiciona el pronóstico”, cerró.

El hecho

Según explicó el viernes el fiscal Matías Merlo, los delincuentes dispararon al menos trece veces contra la Kangoo que trasladaba la recaudación del Emporio de Golosinas, en la intersección de Wilde y Benegas. Como resultado del ataque resultó herido el policía, que se encontraba al interior del vehículo junto al tesorero de la empresa.

Por el calibre de las balas, el fiscal explicó que los delincuentes habrían utilizado dos armas de fuego para cometer el atraco. Asimismo, indicó que una de las hipótesis que se manejan es que "los estaban siguiendo". En tanto, los atacantes abandonaron el vehículo utilizado a pocas cuadras del lugar y allí mismo se subieron a otros dos. 

“Inferimos que se hacen disparos para detener la marcha de la Kangoo y podemos suponer que no hubo intercambio de disparos sino que fue un ataque directo”, agregó el fiscal. Asimismo, subrayó que “hay un importante faltante dinero” en el bolso que se encontraba en el asiento trasero, donde se trasladaban unos 35 millones de pesos.