En el marco del Día del Animal (29 de abril) y bajo el lema "Nada que celebrar", proteccionistas independientes de la ciudad se movilizarán este viernes a las 9 al Instituto Municipal de Salud Animal (IMUSA) de calle Francia al 1900 para denunciar una vez más las condiciones de alojamiento de los animales y reclamar el traslado de todos ellos al Centro de Adopción Municipal (CAM), ubicado en Juan Pablo II 2250 Bis. También exigen guardias veterinarias las 24 horas y fines de semana, alimento "digno y saludable", más personal en el CAM, controles veterinarios cuando el animal ingresa al IMUSA, "cumplir con la promesa" de aumentar el número de castraciones y el registro de ingreso y egreso de animales. 

"Las cosas en IMUSA siguen igual. El año pasado nos reunimos con (el Intendente Pablo) Javkin pero con la excusa de la pandemia no se cumplió nada de lo prometido. Lo que seguimos pidiendo es que la totalidad de los perros que están alojados en calle Francia sean trasladados al CAM, donde están un poquito mejor", comentó a RosarioPlus Marcelo Romano, integrante del grupo de proteccionistas.

Por otro lado, subrayó la necesidad de que el alimento ofrecido a los animales sea de mejor calidad argumentando que viven descompuestos. "También pedimos que les hagan análisis y ecografías cuando ingresan, en lugar de tirarlos en los caniles porque cuando empiezan a manifestar alguna enfermedad ya es tarde por la falta de controles", indicó.

En tanto, Romano recordó que se incumple una ordenanza por la cual los animales que ingresan al IMUSA deben ser registrados en tanto que esos datos (entre los que se encuentran el nombre y el estado de salud) debe ser publicado en la web municipal. "Funciona como un campo de concentración, el perro entra y no se sabe más nada", sostuvo. Los proteccionistas estiman que en la sede de calle Francia aún permanecen alojados unos 20 animales.

"El intendente había prometido 60 mil castraciones en un año y para eso iba a incorporar más móviles en distritos pero no lo cumplió. Eso tiene que ver con que la corporación veterinaria se opone porque va contra su negocio y por eso está frenado. Lo cierto es que la castración es necesaria para que no haya tanta superpoblación de animales en la calle", agregó Romano.