El concejal Eduardo Toniolli presentó un proyecto que pretende que se especifique mediante ordenanza que durante los días de lluvias los colectivos urbanos deben frenar, si así se lo requiere, en todas las esquinas. Algo que al día de hoy está librado a la buena voluntad de los choferes, buena voluntad que es bastante común que falte.

Según especificó el edil el proyecto pretende establecer “la obligación de los colectivos de parar en todas las esquinas en jornadas de lluvias y tormentas, y otro tanto -en este caso todos los días a toda hora- cuando lo requieran mujeres embarazadas”. Si bien estas dos disposiciones están presentes en la Ley Nacional de Tránsito (Nro 24.449/1994), no están incorporadas al marco regulatorio local del transporte público. 

En ese marco, Toniolli, integrante de la Comisión de Servicios Públicos del Concejo, señaló que “la ordenanza 7802/2004 incorporó hasta el momento dos excepciones en las que los colectivos deben detenerse en todas las esquinas: en horario nocturno (en Rosario rige desde las 20 hasta las 7 del día siguiente), y para el descenso y ascenso de usuarios con alguna discapacidad motriz o visual”. 

Finalmente, indicó que lo que se propone es “poner la normativa local a tono con lo dispuesto a nivel nacional" y de este modo "se incorpore formalmente la obligación para las unidades del transporte público de detenerse en todas las esquinas cuando lo requiera una usuaria embarazada, y en días de lluvia o tormenta cuando lo requiera cualquier pasajero, aún cuando no corresponda a una parada establecida”, cerró Toniolli.