El histórico apagón del domingo pasado, que dejó sin luz a unas 50 millones de personas en Argentina y partes de Brasil, Uruguay y Chile, provocó la pérdida de producción de varias panaderías rosarinas que se perdieron la oportunidad de vender sus productos en el Día del Padre.

"A la mayoría de los panaderos los agarró trabajando, con mucha mercadería sin cocinar", comentó Gerardo Di Cosco, presidente de la Asociación de Industriales Panaderos de Rosario (AIPR), al hacer referencia al inicio del corte de energía eléctrica. "Lamentablemente el pan es un producto que si no lo cocinás en el momento de leudar, se pierde", explicó.

En diálogo con Ariel Bulsicco, en Sí 98.9, el empresario afirmó que además del pan se perdieron otros productos que necesitan conservarse en heladeras, como las masas finas, las tapas de tarta y de empanadas".

"Nos quedaba una parte importante del trabajo por hacer cuando se cortó la luz", lamentó el panadero y añadió: "Con esta situación que venimos soportando hace un año y medio y este apagón del domingo fue un golpe duro para la industria".

Aunque algunas panaderías de la ciudad cuentan con generador y pudieron finalizar su proceso de producción, la mayoría no tuvo demasiadas herramientas para reducir el impacto del apagón.

"Han matado un montón de pymes, las personas se han quedado sin trabajo y se ha duplicado la gente que te viene a pedir para comer, es doloroso", concluyó Di Cosco.