La ciudad despide a sus 80 años a Hugo Diz, poeta ilustre en el mundo de habla hispana, así como también artista plástico de collages y realismo, fotógrafo, autor de destacados tangos y hasta de varios discos en conjunto con Litto Nebbia. Un maestro del mundillo literario que decenas disfrutaban desasnarse entre parroquianos del Beat Memo, oficina diaria del artista en la esquina de Oroño y Güemes.

“Era un maestro con todas las letras, de esos que siempre tienen historias diletantes, tan encantador que tenía siempre muchos amigos”, precisó desde la editora Ciudad Gótica Sergio Gioacchini, quien publicó nada menos que su obra poética completa en seis tomos –enormes de más de 300 páginas cada uno- entre 2003 y 2016 bajo el nombre “Palabras a mano”.

El editor y escritor destacó además su dotes de letrista, ya que entre muchas obras fue muy reconocido el tango “Secuencias de mayo” de Diz sobre El Rosariazo, escrito “en tiempos en que oficiaba como periodista cultural en su juventud en el Decano de la prensa argentina”, aseguró. Formó parte en esos tiempos también de la reconocida revista cultural rosarina El lagrimal trifurca.

Diz era una referencia en el mundo poético local, al punto que fue de los organizadores del Festival Internacional de Poesía FIPR, y luego en los últimos años como invitado de honor. Sus obras son reconocidas en el mundo principalmente en España y en Italia, donde fue traducido también, remarcó Gioacchini.

El editor incluso destacó sus dotes como artista visual, ya que tiene una obra plástica de Diz colgada en sus paredes, y hasta “un collage suyo oficia de arte de tapa de un libro de mi autoría”, precisó.

Murió el multifacético artista rosarino Hugo Diz a sus 80 años

Para la tarea de recopilar toda su antología poética, Gioacchini recordó “haber retomado cada una de las publicaciones de Diz, sobre las cuales debí tipear una por una para cada tomo, y en los últimos dos fueron dedicados especialmente a los aforismos”.

En 1965 Diz comenzó a publicar poemas en revistas del país y para el año 1969 publicó su primer libro El amor dejado en las esquinas (1969). Formó parte de la antología 200 años de poesía argentina (2010). Participó en diversos encuentros de poesía, entre los que se destaca el Festival de Poesía Latinoamericana en Viena, Austria. Poemas suyos fueron traducidos al ruso, francés, húngaro y alemán.