Las pequeñas y medianas empresas que sobrevivieron a la crisis económica de los últimos años se encuentran en terapia intensiva y exigen que la Afip no les desconecte el respirador automático que les dio Alberto Fernández ante la posibilidad de que promueva una moratoria impositiva para el sector.

Apyme y otras organizaciones le solicitaron al Gobierno que, "en el marco de una aguda crisis recesiva, con altas tasas de insolvencia y cortes en la cadena de pagos" se vuelva a extender la suspensión de embargos de la Administración Federal de Ingresos Públicos hasta que asuma el nuevo gobierno.

Según indicaron desde la entidad, a través de un comunicado, las expectativas de los empresarios es que Alberto Fernández envíe al Congreso una ley "a fin de aprobar una amplísima y beneficiosa moratoria impositiva que se ajuste a la cruda realidad que atraviesa el sector".

"Confiamos en que en el próximo perìodo se iniciará un rumbo de recomposición económica y social con eje en la creación de empleo y fomento de la producción, pero hoy no puede pasarse por alto que la mayor parte de las Pymes que han logrado sobrevivir están en condiciones de extrema vulnerabilidad", señalaron desde Apyme.

La organización que nuclea a micro, pequeños y medianos empresarios indicaron que la AFIP sigue "intimando en forma sistémica, sigue emitiendo boletas de deuda, y hay miles de empresas que quedarán expuestas a ser embargadas ante la imposibilidad de afrontar las obligaciones tributarias o previsionales adeudadas".

Por este motivo, Apyme le solicitó a las actuales autoridades de AFIP que dispongan la extensión del plazo de la suspensión de embargos hasta que las nuevas autoridades legislen y reglamenten la nueva moratoria.