El comienzo de semana amaneció sin clases en tres escuelas del barrio Las Flores, por la denuncia contra un profesor de Educación Física por el supuesto abuso a una niña de tres años que el pasado viernes terminó en una violenta pueblada.

Así fue dispuesto por el propio Ministerio de Educación, y habrá asamblea de docentes, a la espera de los pasos a seguir en el jardín donde ocurrió el episodio, la Escuela General Belgrano 1257 y una escuela especial que se encuentra contigua, en Clavel al 7200.

Marisa Aybar es docente de la escuela primaria, y precisó sobre el complejo panorama al móvil de Sí 98.9 que “las tres instituciones van a permanecer cerradas por decisión del Ministerio, y mañana veremos si habrá o no clases”.

Además precisó: “Hoy el gremio organizó una desobligación para visibilizar lo que está pasando en la comunidad escolar, para que no siga ocurriendo y en la docencia rosarina algunas escuelas van a desobligar y en otras irán los delegados. Necesitamos que el Ministerio decida cómo seguimos, con la suspensión de las clases no alcanza”.

Ocurre que las implicancias de la no asistencia a clases en este caso tienen otro factor preocupante, que se trata de instituciones que brindan el alimento a sus alumnos. Es por eso que la docente reflexionó: “Lo peor que podemos hacer es cerrar las escuelas, más como está la situación actualmente. Ellos necesitan una atención integral de este caso: la atención a la niña, a los docentes y en general a la población, que hay mucha indignación y se comprende por la gravedad del hecho hasta que se investigue”.

En paralelo una vecina que trabaja en la escuela también aseguró a la radio que “los padres no quieren enviar a sus hijos”, y recordó que “El viernes hubo muchos familiares reclamando hasta el mediodía, hubo media hora de tensión porque hubo corridas, piedrazos y disparos de balas de goma, encima justo era el horario de salida de los chicos. Vinieron efectivos policiales y la situación se tranquilizó”.

Y aseveró que “hasta que padres no tengan una respuesta los padres no llevarán a sus hijos, y el problema es que tampoco habrá comedor abierto durante los días”.

Ocurre que el pasado viernes mientras las personas se encontraban frente al establecimiento educativo, ubicado en calle Clavel al 7200, el presunto abusador intentó salir del edificio escolar y comenzó un ataque a piedrazos y manotazos.