La muerte del enfermero Tito Ramírez por covid 19 estremeció más allá de los límites del Hospital Centenario, donde trabajaba. Es que en la misma novedad se supo que en estos días también su esposa había fallecido, víctima de la pandemia, y los hijos de la pareja están por estas horas lidiando con trámites para venir desde Perú, donde residen.

Quienes a diario transitan, habitan y trabajan en la zona de Urquiza y Francia conocían a este trabajador de la salud, peruano de origen, y en algunos casos hasta habían trabado la amable cordialidad que propicia el encuentro cotidiano. 

Es el caso de los cuidacoches que todos los días ocupan su puesto en la dársena de la avenida Francia. Jorgito, uno de ellos, se enteró poco antes del arribo del móvil de Sí 98.9 al hospital.

La tristeza del cuidacoches por su enfermero amigo que murió

"No podemos creer que este muchacho haya fallecido por el coronavirus. La noticia nos dejó helados. Hace años que lo conocíamos a este enfermero, era una persona muy buena. Le decíamos El Paraguayo, era vecino nuestro, en barrio Cero. La señora también falleció en estos días", contó el hombre, todavía consternado por la muerte del trabajador de la salud.

Jorgito comentó el escozor que ha sentido en este tiempo como testigo colateral de la cuenta negra de muertes por coronavirus. "Hasta hace tres semanas veíamos sacar 5 o 6 muertos por día del hospital. Nosotros estamos acá porque otro trabajo no podemos hacer. Nos sacaron los beneficios del IFE, lo único que nos queda es hacer esto para hacer una moneda, otra no nos queda", concluyó.