La empresa de transporte particular Uber volvió a la carga con una campaña publicitaria en Rosario, para reclutar choferes e intentar de nuevo hacer pie en la ciudad. Ante ello, la Municipalidad salió al cruce para sentar posición: "de ningún modo permitirá el funcionamiento de empresas que violan la normativa vigente", señalaron este jueves desde el Palacio de los Leones.

"A partir de los anuncios publicitarios lanzados desde la empresa Uber sobre su posible arribo a la ciudad como empresa prestadora de servicio de viajes, la Municipalidad aclara que dicha firma no se encuentra habilitada para funcionar en la Rosario ya que no cumple con las normativas vigentes", precisó el comunicado oficial del Ejecutivo.

Fuentes del municipio deslizaron además que la campaña se lanzó sin reuniones ni consultas previas a la autoridad competente, en contraste con la mesa permanente que la Intendencia mantiene con choferes y titulares de taxis. 

"Desde el Ejecutivo se afirma que no está permitido el ingreso de empresas que han demostrado no adaptarse a las regulaciones vigentes en ninguna de las ciudades que han intentado operar, y que se sancionará según la normativa vigente".

La diferencia estriba en que los taxistas y remiseros se encuentran bajo regulación del municipio y tienen el deber de atravesar primero un período de formación y el cumplimiento de requisitos, carnet profesional y control permanente de vehículos, tanto en su mecánica como en su higiene. "Incluso la tarifa se fija por el Concejo Municipal, a partir de los estudios de costos realizados por el Ente de la Movilidad", distinguió un vocero municipal.

"Toda empresa de servicios de viajes que pretenda funcionar en la ciudad de Rosario debe ajustarse a los requisitos y obligaciones que establece la normativa vigente para poder circular, tales como la habilitación del vehículo y demás requisitos que regulan la actividad", concluye el comunicado.