La aparición de un ciervo deambulando por las calles de Oroño puso en el tapete la actividad de caza en la provincia de Santa Fe. Reglamentaciones, normas y registros quedaron bajo la lupa de la Defensoría del Pueblo desde donde requirieron al ministerio de Medio Ambiente, al de la Producción y la secretaría de Turismo información sobre controles sobre presuntos cotos de caza en el territorio santafesino, turismo cinegético y medidas de control sobre el tráfico ilegal de fauna.

En el escrito dirigido al ministro de Medio Ambiente, Jacinto Speranza, la Defensoría del Pueblo indicó que la resolución 204 de julio de 2017 reglamentó “la introducción, permanencia, crianza y control de especies exóticas que amenacen a ecosistemas, hábitats o especies nativas autorizando la caza de tales especies, cuya nómina es descripta y en la que se encuentra la especie ciervo Axis”.

En la misma reglamentación, expresó la “preocupación por la irrupción días atrás de un ejemplar de la especie exótica de ciervo Axis en plena zona urbana de la ciudad de Rosario”, evaluando que “se podría presumir estar ante un caso de tráfico ilegal de fauna”.

Por ello, le solicitó a Speranza informar “si durante el año 2017 y 2018 ha desplegado acciones de control tendientes a evitar el tráfico ilegal de fauna y si ha efectuado controles en la provincia tendientes a la detección de cotos de caza ilegales”.

Por otra parte, la Defensoría del Pueblo le remitió un oficio a la ministra de Producción, Alicia Ciciliani, pidiéndole información respecto del “marco legal por el cual se regula el turismo cinegético en la provincia de Santa Fe” y los controles llevados a cabo por su cartera al respecto.

Por último, el organismo dirigido por Raúl Lamberto envió un pedido de informes al secretario de Turismo provincial, Martín Bulos, instándolo a “informar la nómina completa de establecimientos registrados y habilitados actualmente en la provincia por esa Secretaría para funcionar como operadores cinegéticos”.