El Frente de Todos convocó a una sesión para tratar el martes 5 de octubre en la Cámara de Diputados del Congreso la Ley de etiquetado frontal que estaba cajoneada, antes de que pierda estado parlamentario.

El proyecto de ley de “Promoción de la Alimentación Saludable” fue aprobado por el Senado en octubre del 2020 y el 13 de julio último se emitió dictamen favorable en un plenario de las comisiones de Legislación General, de Acción Social y Salud Pública, Industria y Defensa del Consumidor, del Usuario y de la Competencia y de Industria de Diputados. Pero si no era tratada en sesión y aprobada, peligraba su estado parlamentario en dos meses, como advirtieron las organizaciones civiles que reclamaban su tratamiento.

Entre otros puntos, la normativa busca implementar un etiquetado frontal de octógonos negros con la inscripción “Exceso en..” para advertir en los envases sobre el contenido excesivo de nutrientes críticos como azúcar, grasas y/o sodio.

En el oficialismo dicen que los números están y el objetivo siempre fue intentar aprobarla antes de las elecciones legislativas.

La ley busca concientizar a la población sobre los componentes nutricionales de la comida envasada, a partir de etiquetas negras que dirán "Alto en grasas", "Alto en sodio", "Alto en azúcares", entre otros indicativos al frente de los paquetes, latas y botellas.

La idea es que las y los consumidores no tengan que googlear qué quieren decir etiquetas inentendibles para decidirse o no a llevar un producto a la mesa. Cada advertencia --que oficiaría como una "notificación" de alerta-- vendrá acompañada de un consejo: "Evitar su consumo excesivo" o, directamente, "Evitar su consumo".

Ah, pero el lobby

Al lobby azucarero -que tiene un actor de peso en el actual jefe de gabinete Juan Manzur- y al de la industria alimenticia, está en contra y pide cambios en el texto. Les preocupa la caída de ventas y el no poder hacer ciertas publicidades. Es que la norma también busca regular las publicidades de estos alimentos y su venta en entornos escolares. 

A los pedidos de las organizaciones civiles para acelerar el trámite, este martes se sumó la propia secretaria de Comercio Interior del Gobierno, Paula Español, quien pidió "que salga la ley de etiquetado frontal en breve". "Los consumidores tenemos derecho a saber qué compramos y qué comemos", señaló en declaraciones a El Destape Radio.

"Tenemos una parte importante de reglamentación de esta ley", admitió la funcionaria. La reglamentación, incluso, es parte de la promesa del oficialismo para lograr aprobar la ley sin cambios, y evitar que vuelva al Senado.

Los dichos de Español cobran peso frente a un rumor que en las últimas horas cobró peso. La posibilidad de que Manzur utilice su poder de jefe de Gabinete nacional para frenar la norma. Como ex gobernador de Tucumán, una de las principales provincias azucareras, el funcionario siempre se mostró en contra de la iniciativa.

Lo cierto es que desde el 8 de julio, cuando tuvo lugar la última sesión, que no se consigue. Por estos días, el principal problema parece ser lograr reactivar el funcionamiento del Congreso -que está en proceso de vuelta a la presencialidad- y acordar una agenda de consenso que garantice lo que el FdT no puede lograr por su cuenta: el quórum.