El gobernador Miguel Lifschtiz se refirió a la tragedia ocurrida en Punta Stage, el boliche de Arroyo Seco donde fallecieron dos jóvenes. Dijo que “quienes son empresarios de la diversión terminan lucrando con la salud y la vida de las personas”, y señaló que "hay responsabilidad de los municipios que deben controlar".

A la vez, el mandatario apuntó la posible “responsabilidad penal” que le cabría a los organizadores de la fiesta y al municipio de Arroyo Seco aunque aclaró que a eso “lo va a definir la Justicia”.

Lifschitz dijo que “dan indignación ese tipo de fenómenos porque están asociados a la irresponsabilidad de empresarios, propietarios de boliches, productores de espectáculos y DJs” ya que, enfatizó, “todos saben lo que pasa y los riesgos que se corren en esos lugares”.

“Creo que eso es muy grave -siguió- y creo que la responsabilidad de quienes se dedican a este tipo de actividades debe ser rápidamente dilucidadas y hacerse cargo de las responsabilidades civiles y penales que les caben”.

Lifschitz también señaló la posible responsabilidad oficial de la Intendencia de Arroyo Seco, localidad ubicada a 25 kilómetros al sur de Rosario.

“Hay una responsabilidad de los municipios, que son quienes deben controlar y autorizar o habilitar ese tipo de eventos”, remarcó en declaraciones televisivas.

Tras la fiesta, murieron por aparente consumo de éxtasis una chica rosarina de 20 años, Giuliana Maldovan, y un hombre de la ciudad bonaerense de San Nicolás, Lucas Liveratore (34).

(Télam)