Mucho se habló siempre de los elevados costos que conlleva unir los lazos, entre gastos de Registro Civil, servicios religiosos y todo el festejo. Incluso en estos tiempos hasta hay que calcular lo que se llevan los modernos wedding planners que se encargan de que todo salga al pie de la letra. Pero es poco lo que se conoce sobre lo que puede llegar a costar el divorcio.

En la provincia, los trámites para romper el matrimonio cuestan aproximadamente unos 40 mil pesos según contó la abogada Florencia Jaureguizar en Sí 98.9.

“Según dispone la Corte Suprema de Santa Fe, divorciarse cuesta 14 jus por abogado defensor, además de los costos generales. El jus es una unidad de valor relacionada al precio actualizado del peso, por ejemplo actualmente un jus equivale a $1875, 53”, reveló la letrada.

Algo que ahorraría un poco el gasto es si los dos cónyuges comparten el profesional (permitido en el nuevo Código Civil), y “esto disminuiría el honorario para ambos, ya que correspondería abonar sólo por los costes de uno en vez de dos abogados”, explicó. Lo que es seguro es que los costos finales los pagan entre las dos partes.

Pero además de los 14 jus por ley, otra suma de dinero dependerá de los bienes declarados del matrimonio, y las cuotas alimentarias de sus hijos, por lo que será diferente según la pareja. “Cuando se inicia la demanda de divorcio, se debe presentar una propuesta de acuerdo, donde dice cómo pretende dividir los bienes, donde también se detalla cómo será el cuidado de los hijos, y se propone la cuota alimentaria”, precisó Jaureguizar.

El acuerdo buscará mantener el mismo nivel de vida que durante casados, por lo que esto implicará que “la parte que más dinero disponga deberá aportar a la otra parte siempre que haya hijos menores de edad en común que mantener”. Al comparecer en la demanda, la otra parte puede aceptar o rechazar la demanda, y si la rechaza puede dar una contra propuesta.

Divorciarse en Santa Fe es mucho más sencillo con el nuevo código civil, y por eso lo llaman divorcio express. Entre tres a seis meses son suficientes para obtener la sentencia.

Anteriormente era necesario que las dos partes decidan divorciarse, mientras que ahora con la voluntad de uno de los dos es suficiente, y no existe la audiencia previa de conciliación, en la que el juez abogaba por la continuidad del matrimonio.