Construcción en altura: el proyecto de Javkin que busca cambiar las reglas
El Ejecutivo municipal presentó un anteproyecto que define nuevas reglas para la construcción de torres, con mayores alturas permitidas y sin recurrir a excepciones. La iniciativa busca habilitar hasta 120 metros en más de 400 lotes y sumar exigencias ambientales como cubiertas verdes o suelo natural.
El Ejecutivo local impulsa una nueva ordenanza que busca modificar las reglas de edificación para permitir la construcción de torres en distintos puntos estratégicos de la ciudad. La propuesta define un nuevo régimen denominado "Edificación de Perímetro Libre - Torre", que dejaría atrás el actual esquema de excepciones puntuales para dar lugar a una normativa general que habilite mayores alturas y densidades.
La iniciativa permitiría que unos 448 lotes de más de 1.000 metros cuadrados puedan ser considerados para el desarrollo de edificios de hasta 120 metros de altura. De ese total, 295 terrenos se ubican en el área central y en el Área de Tejido 1 (ATI), mientras que el resto se distribuye en principales corredores y frentes urbanos.
El proyecto sostiene que este tipo de construcción favorece la permeabilidad visual hacia el interior de las manzanas y promueve una mejor articulación entre el espacio público y el privado. Según el texto, la nueva normativa permitiría "optimizar la compacidad urbana" y viabilizar procesos de renovación edilicia en zonas donde hoy se permite mayor edificabilidad.
Uno de los puntos novedosos es que la ordenanza propone incorporar un parámetro ambiental obligatorio, que exige un mínimo del 30% de cobertura vegetal por parcela. Esto podría cumplirse mediante cubiertas verdes o incorporación de suelo natural.
Además, el régimen establece nuevos retiros mínimos, límites de altura diferenciados según zona y coeficientes de ocupación adaptados a cada sector (Área Central, ATI, Corredores Urbanos y Frentes Urbanos). En el caso de los corredores, la altura máxima dependerá no sólo del tipo (A, B o C), sino también del tejido urbano que atraviese o delimite.
Otro aspecto clave es que se fijan dimensiones máximas para el desarrollo en planta, tanto en frente como en profundidad, con el objetivo de mejorar la implantación de las torres en los terrenos, minimizar su impacto en la manzana y garantizar ventilación, asoleamiento y escala urbana adecuada.
Según argumenta el Ejecutivo, la ordenanza busca “promover la renovación urbana, diversificar usos edilicios y mejorar el espacio público y semipúblico, además de incorporar parámetros ambientales para elevar la calidad de vida en la ciudad”.
En los próximos días, funcionarios de la Secretaría de Obras Públicas y Planeamiento municipal se presentarán en la comisión de Planeamiento del Concejo para dar cuenta del proyecto y responder inquietudes de los ediles.