La audiencia pública convocada por el Ente Regulador de Servicios Sanitarios (Enress) para debatir el incremento de la tarifa de agua el año próximo, comenzó en la sede de gobierno de la Universidad Nacional de Rosario (UNR) con asistencia regular por el momento. 

Las diferentes asociaciones de consumidores, representantes políticos y ciudadanos debatirán durante una semana el nuevo importe del servicio que habrán de pagar los 720.000 titulares de cuentas de Aguas Santafesinas SA (Assa). Hoy se realizará en Rosario, el jueves en Casilda y el 29 en Santa Fe.

A fines del mes pasado, la empresa provincial oficializó su pedido de aumento en cuatro tandas: 38 por ciento en el primer bimestre del año que viene y luego tres subas adicionales del 11 por ciento. El anuncio de la empresa despertó las críticas de la mayoría de las agrupaciones que nuclean a los usuarios del servicio de agua.

"Sabemos que la devaluación, los combustibles, los productos importados que usa ASSA para la potabilización, y también el terrible aumento del costo de energía eléctrica, han sido factores que incidieron mucho en los costos, pero no podemos como usuarios aceptar esa realidad y decir que está bien que nos aumenten la tarifa en un 90%", manifestó Juan Marcos Aviano, director Ejecutivo del Cesyac.

Además de la disconformidad con la suba del servicio, Aviano propuso: "Llevamos una contrapropuesta, que ya fue presentada como iniciativa al Ministerio, al Enress y Aguas, con aumentos de 6% por bimestre durante cada período en 2017, lo que sería un 36%. La gente así lo siente menos, y sabe que es un esfuerzo que puede pagar frente a un 90% que nos parece excesivo, imprudente y a destiempo".

Qué dice Assa

Desde Assa fundan su propuesta en la escalada inflacionaria y en la devaluación, que impacta sobre el costo de muchos de sus insumos químicos, dolarizados. Este año, la compañía cerrará con un déficit de 600 millones de pesos que cubre el Tesoro provincial, además de otros 700 millones que desembolsó como subsidios en inversión para la infraestructura de la red. "El Estado seguirá subsidiando el servicio, sin dudas, pero aspiramos a que el costo operativo al menos lo cubra el usuario", explicó el gerente de Relaciones Institucionales de la empresa, Guillermo Lanfranco.

Según el funcionario de Assa, el acumulado de 89% de incremento al final de 2017 tendrá, en realidad, un impacto real de menor magnitud -del 56% según sus cálculos- y concluirá en que "para el primer bimestre de 2018, ya con todo el aumento aplicado, dos tercios de los usuarios pagarán menos de 320 pesos". Por otra parte, otra pretensión de la compañía es reestructurar su esquema de facturación, y para ello debe avanzar con el sistema de medición de consumo. Assa quiere instalar 320 mil medidores domiciliarios en los próximos cuatro años, y para ello necesita más oxígeno financiero, a través de un aumento.

Las audiencias comenzarán este martes, a partir de las 9, en la sede del Rectorado de la Universidad Nacional de Rosario, salón Ricardo Suárez, en Maipú 1065 (entre San Luis y San Juan). El 24 de noviembre, en el mismo horario, en Casilda, en el Salón Dorado de la Municipalidad, Carlos Casado 2090. Y por último, el 29, también a las 9, en la Facultad de Ciencias Jurídicas y Sociales de la Universidad Nacional del Litoral, Cándido Pujato 2751, de la ciudad de Santa Fe.