Al día siguiente de que la intendenta Mónica Fein anunciara algunas medidas para intentar disminuir la violencia urbana y el delito, los inspectores salieron a la calle con la instrucción de intensificar controles vehiculares.

Desde la Municipalidad informaron este jueves que durante la noche anterior hubo varios puntos fijos de control y que hubo ochenta motos secuestradas y remitidas al corralón, en su mayoría por irregularidades en la documentación de cada rodado o porque los ocupantes carecían de casco protector.

"La intensificación de controles vehiculares apunta a reforzar la presencia estatal en las calles de la ciudad generando un entorno de mayor seguridad. Todos los operativos concernientes contaron con personal de la Secretaría de Control y Convivencia Ciudadana y efectivos de la Unidad Regional II, en vistas de un trabajo en conjunto con la policía de la Provincia", señaló el comunicado oficial.

En la víspera fueron alrededor de 300 vehículos interceptados y controlados. Y en la noche de este jueves se repetirá el procedimiento, advirtieron desde el municipio,. por lo que recomendaron como importante que los conductores cuenten con la documentación que se solicita desde las áreas de control y cumplan con las medidas de seguridad exigidas.