El hombre que en octubre del año pasado asesinó a su mujer y su beba de dos años en barrio Acindar fue sobreseído, y continuará internado en la colonia psiquiátrica de la ciudad de Oliveros.

El juez penal de primera instancia Héctor Núñez Cartelle sobreseyó a Iván Furiasse, tal como lo había pedido el fiscal de Homicidios Dolosos Florentino Malaponte en marzo. La decisión judicial se basó en una pericia de Salud Mental del Ministerio de Salud que describió que el hombre “no pudo comprender la criminalidad de sus actos".

A pesar de que no caben dudas de que Furiasse fue el autor material de los homicidios, Malaponte había pedido “que el proceso continúe en la Justicia civil, para que se determine su grado de incapacidad”, basado en el resultado de los estudios forenses, que dictaminaron que no tiene capacidad para comprender el hecho que cometió ni está en condiciones de afrontar un proceso penal.

Los estudios arrojaron que el asesino sufre una “desorganización del pensamiento y alucinaciones”, con riesgo de volverse crónicas, y "existe la posibilidad de que manifieste tendencias suicidas y éste cuadro es difícil o imposible de simular”, por lo que recomendaron que continúe internado.

Furiasse habría sufrido un brote psicótico aquel trágico 24 de octubre de 2017, en que mató a su esposa y a su hija en su hogar de Villarino 3700. En enero del año pasado ya había sido internado durante dos meses por un episodio similar.