Nunca se sabrá si Carlos Argüelles, el testigo del caso Alvarado al que asesinaron esta semana, tenía todavía más datos para brindar a la Justicia de los que ya había aportado. Lo que sí empezarán a saberse en las próximas horas son los motivos para su ejecución. Es que pocos minutos después del crimen, cayeron las cuatro personas que viajaban en el VW Fox rojo que había llegado hasta el taller mecánico del ex integrante de la banda de Lindor Alvarado, para matar a Argüelles. Por ahora son los presuntos autores del hecho, porque no se les encontraron armas que acaso hayan descartado antes de ser emboscados. En las próximas horas, cabe recordar, se les hará un dermotest. Se podrá indagar además cuál fue el móvil del asesinato y si alguien los contrató para la tarea. Aunque antes de eso, los investigadores ya trabajan sobre una hipótesis firme, según pudo saber RosarioPlus.

La foja policial de los tiradores tiene que ninguno de los cuatro registra antecedentes penales pesados, pero todos habían pasado alguna vez por la prisión y manejado armas. Los cargos que acumularon hasta aquí habían sido robos, encubrimiento y tenencia de armas en el peor de los casos. En la jerga de los grupos mafiosos, no había capos ni jefes para ejecutar el crimen, pero sí eran al menos "tira tiros", como se denomina a este "oficio" de cobrar un dinero para cumplir con el encargo de balear un objetivo, sea un inmueble o una persona. 

Los detenidos son Rodrigo Santiago V. (44 años), Aldana Victoria P. (27), Maximiliano Oscar M. (28), y Nahuel Lautaro A. (19).

En dos entrevistas periodísticas que brindó el martes por la noche, el ministro de Seguridad Jorge Lagna adelantó que "se está muy cerca de establecer los vínculos de Alvarado con el crímen de Argüelles", tras destacar la labor policial para la detención de los probables autores del asesinato. Fuentes calificadas del Ministerio, en diálogo reservado con RosarioPlus, confiaron que la única mujer que viajaba en el Fox es la novia de Dardo Basualdo, que está detenido en Piñero y es uno de los tiradores de la banda que lo tiene como jefe a Lindor Alvarado, quien fue trasladado desde esa misma prisión santafesina a una federal, tras la última y escandalosa fuga del 27 de junio.

Investigadores que colaboran con la causa señalaron a RosarioPlus: "Basualdo está en el Pabellón 4 y su novia estaba en el Fox. Está claro que la orden vino de Alvarado, los demás son soldados. Pero hoy la comunicación para este tipo de acciones no es por celulares, sino por las visitas. Vamos a cruzar las más de dos mil visitas semanales al Penal y en especial a los altos perfiles".

Como parte de la investigación del asesinato de Argüelles, hubo una requisa este martes en la Unidad Penitenciaria N° 11, en Piñero, en concreto, sobre el pabellón que aloja a Mauricio Laferrara, uno de los laderos de Alvarado. Se secuestraron algunos teléfonos celulares y se cree que se está cerca de dar con más pistas del conmocionante -aunque anunciado- crimen.

La escena del crimen, en Garay al 3500.
La escena del crimen, en Garay al 3500.