Primera aclaración. En Argentina, la lucha contra el narcotráfico es cosa de hombres. Veintiuno de los veintidós disertantes de las jornadas que desde esta mañana se realizan en la Facultad de Derecho son del sexo masculino. Son ellos los que, aparentemente, tienen algunas soluciones entre manos para revertir un modelo de persecución que tiene muy pocos resultados para mostrar.

Segunda aclaración. Para fiscales, procuradores y funcionarios, la desfederalización del narcomenudeo aparece como la gran solución para no seguir corriendo de atrás al fenómeno. Hay un consenso para que los Estados provinciales tengan injerencia en la problemática. 

Tercera aclaración. Ningún actor con decisión y competencia en esta lucha se plantea la posibilidad de la legalización de algunas sustancias como una respuesta a los eternos fracasos del sistema hegemónico represivo y punitivo.

Esas, al menos, son las primeras conclusiones que dejó la apertura de las "Jornadas sobre Narcocriminalidad" que se están llevando a cabo desde esta mañana en la Facultad de Derecho. Quienes tienen injerencia y decisión en las políticas pública para combatir el tráfico de drogas debaten los "pasos a seguir" para mejorar "la lucha contra las drogas".

El gobernador Miguel Lifschitz fue el encargado de dar las palabras de bienvenidas. Reconoció que el paradigma de la "guerra contra las drogas" ha fracasado en Argentina y en todos los países de la región. Pidió poner el eje en las "implicancias sociales, culturales y de salud pública" antes que en la "parte represiva". Y remarcó que "la experiencia y la práctica" demuestran la imperiosa necesidad que las Estados provinciales participen en la persecución de estos ilícitos. 

"Están las organizaciones sofisticadas, las que ingresan la droga por las fronteras para volcarla al territorio nacional. Pero en los barrios tenemos otras organizaciones, más precarias pero muy violentas. Los Monos son el ejemplo más conocido. Estas bandas montan negocios paralelos, afectan la convivencia en el día a día. Necesitamos poder intervenir ante esta realidad", argumentó el mandatario. 

El concepto de desfederalización --en pleno debate en Santa Fe-- fue abordado por los otros disertantes. Mario Bongianino, presidente del Concejo de Procuradores y Procurador General de La Pampa, llamó a "fiscales federales y provinciales a trabajar juntos para afrontar de forma conjunta un fenómeno  complejo y plagado de aristas". "Las drogas están y están cada día más. La actual ley de desfederalización no es la mejor herramienta legal, se puede perfeccionar, pero es la que tenemos. Necesitamos estrategias conjuntas", pidió.

El Procurador General de la Nación, Eduardo Casal, reconoció que cuando escucharon por primera vez la palabra desfederalización "se agarraron la cabeza" por los "miles de conflictos de competencias que iban a aparecer en puerta". "Nos confundimos. Hoy la experiencia demuestra que si se se trabaja con coordinación y eficiencia, los resultados aparecen", explicó.

A su turno, Pablo López Viñals, presidente del Concejo Federal de Política Criminal y Procurador General de Salta, cuestionó la "persecución asimétrica" contra el narcomenudeo que existe hoy en el país. "No puede ser que haya provincias que ejerzan una profunda intervención penal y otro no por las carencias y las limitaciones de la justicia federal", dijo. El escollo, a su juicio, para avanzar en la desfederalización pasa por quién o quiénes van a financiar los altos gastos de traspaso.

Guillermo Soares Gache, representante del Ministerio de Seguridad de la Nación, también hizo hincapié en la "experiencia de gestión" para defender la injerencia de los Estados locales en la lucha contra el narcomenudeo. Afirmó que hoy la desfederalización "es el camino adecuado para abordar la problemática". 

Puso como ejemplo a Chile, que puso en práctica "grupos específicos de microtráfico" con "muchísimo éxito". "Nosotros también estamos armando estos grupos acá en Argentina. El microtráfico genera la toma de los territorios, deriva en homicidios, afecta a la gente en su vida cotidiana", subrayó.

El ministro de Justicia de la provincia de Buenos Aires, Gustavo Ferrari, cerró el panel con la "intervención integral" que el gobierno de María Eugenia Vidal está llevando a cabo en "ocho barrios complejos" para derribar las "cadenas del narcotráfico". 

Explicó que un "bolsero o vendedor" gana hoy entre 45 y 60 mil pesos mensuales y que un "soldadito" saca entre 22 y 25 mil pesos. "Estamos hablando de ingresos superiores a muchos salarios registrados", planteó.   

El congreso finalizará mañana con un panel centrado específicamente en "los desafíos" de Santa Fe. Disertarán el Fiscal General del MPA, Jorge Baclini; el ministro de la Corta Suprema de Justicia, Daniel Erbetta; el ministro de Justicia y DDHH, Ricardo Silberstein; el presidente de la Cámara de Diputados y ex goberandor, Antonio Bonfatti; el senador provincial Lisandro Enrico; y la presidenta del Colegio de Jueces del Fuero Penal de Rosario, Georgina Elena Depetris, la única oradora mujer de la doble jornada.