La cuenta negra de homicidios en el departamento Rosario sumó en esta mañana de jueves su quinta víctima fatal en menos de 24 horas. Esta vez, la consecuencia de esta escalada de violencia la pagó un kiosquero de Granadero Baigorria que había sido asaltado el miércoles al atardecer, y que murió esta mañana en el Policlínico Eva Perón como consecuencia de las heridas sufridas por el ataque a balazos que le prodigaron dos hombres. Una versión abonó la teoría de un robo a mano armada; pero otra versión apunta a una venganza por un problema personal.

De la investigación que abrió la fiscal Paola Fabbro, se indaga en una escena que pareció como un robo a mano armada, en un kiosco de Eva Perón y Callao, a las siete de la tarde del 20 de enero pasado. Sin embargo, los delincuentes no robaron nada.

Omar Albanese, de 61 años, salió al encuentro de dos hombres que arribaron en moto y pidieron una gaseosa. Pero cuando iba a atenderlos, los supuestos clientes sacaron armas y abrieron fuego.

Los sicarios huyeron y hoy continúan prófugos. Una mujer había llamado al 911 para denunciar que dos hombres en moto –uno a torso desnudo– asaltaron a punta de pistola el kiosco, y en esa situación le habían acertado varios balazos al comerciante, quien cayó malherido.

Según información de Fiscalía, el atraco fue más violento que aquella primera versión. Los policías recogieron en la vereda del kiosco de Eva Perón 1165 nueve vainas servidas calibre 9 milímetros y manchas de sangre. Los vecinos señalaron una moto Yamaha YBR de color oscuro como el vehículo en el que llegaron y se fueron los homicidas. Y dudaron sobre la hipótesis del robo para contar que los atacantes llegaron y abrieron fuego sin más trámite contra el local comercial que atendía Albanese.

El kiosquero fue trasladado por un hijo suyo hasta el policlínico de Baigorria, de donde fue derivado al Heca, para fallecer este jueves sin que pudiera reponerse. Había sufrido "múltiples heridas de arma de fuego en tronco y miembros inferiores", dijo el parte oficial.

El hijo de Albanese refirió que su padre fue atacado por dos desconocidos que acudieron a comprar una gaseosa, pero que en cambio lo sorprendieron con los balazos. Por eso, el muchacho sospechó que el ataque podría haber tenido relación con "problemas de vieja data con su hermano", dijo un vocero policial.

Con el deceso de este kiosquero son cinco las personas que murieron de manera violenta en el departamento Rosario desde este miércoles a la tarde. Primero fue un hombre y una mujer que cayeron acribillados en el interior de un auto, durante una emboscada en Vera Mujica y Rueda. Luego falleció un hombre en el Hospital Centenario, que había sido baleado el lunes pasado en pasaje 1709, de zona oeste. Y a la medianoche murió Luisana Biagiola, de 13 años, cuando la casa de su tía en la que se encontraba, en 27 de Febrero 7326, fue blanco de 35 disparos a manos de un grupo de sicarios.