"¿Sabés por qué la pintada de "Libertad a Ariel Cantero" apareció a la altura de Ayolas? Porque es zona de los Comegatos. Uno de ellos está detenido en la causa, porque tenía a su nombre la Asociación Civil a la que le daban los alimentos que aparecieron en lo del Viejo", le explicaba a este medio un investigador, la última semana. 

Unos días después, al final de la larga audiencia en el Centro de Justicia Penal, la jueza Valeria Pedrana determinaba que Leonardo Pucheta quede en prisión preventiva como el resto de los acusados de integrar una asociación ilícita, ya que que se organizaron "para alterar la paz social y este es un delito que se sanciona por el hecho de formar parte, independientemente de la ejecución de hechos concretos", indicó la magistrado.

El abogado de Pucheta intentó despegarlo de los delitos violentos que se ventilaron en el Centro de Justicia Penal: balaceras, una tentativa de homicidio, extorsiones, tenencia de armas y drogas. Pero Pedrana entendió que había evidencia suficiente para imputarlo y permitir que los fiscales sigan avanzando con una investigación que pueda determinar, entre otras cosas, "cuál es la ruta desde que los alimentos salen del municipio y llegan al barrio", planteó la jueza en la audiencia.

Los Pucheta: de cocinar un gato para la TV a gestionar el comedor del Viejo Cantero

Quiénes son Los Pucheta

En 1996, el periodista Julio Bazán consiguió para un noticiero porteño que en una villa de Rosario pongan un gato a la parrilla. Quienes los cocinaron fueron los Pucheta, en la zona del Bajo Ayolas. Y desde entonces llevan el apodo de "Comegatos", conocidos entre otras cosas por haber disputado la interna de la barra de Central, en alianza con "Pitito" y opuestos a Pillín Bracamonte.

Rosario Comen Gatos

Pero por encima de las rivalidades futboleras de la ciudad, la pelea por dominar el territorio en Rosario tiene códigos que entrecruzan personajes, más allá de estar identificados con el club rival. De hecho, los Pucheta están vinculados a la disputa en zona sur, ligados a "Tubi" Segovia y al "Pimpi" Caminos, jefes de la barra de Newell's. Del lado de enfrente, los Funes y los Ungaro. Para sumar apellidos y nombres de bandas a la pelea territorial, puede recordarse que de un lado está la alianza con los Cantero -como se vio en estos días de la audiencia y la investigación por el comedor- y del otro Alvarado. Cabe recordar que la pareja de Luis Medina al abrir el polémico boliche Esperanto en 2012, era Daniela Ungaro.

Ahora, en la causa contra el "Viejo" Cantero, apareció Leonardo Pucheta por ser el presidente de la Asociación Civil "El Ceibo", que recibía los alimentos del Plan Cuidar. Además, el periodista Germán de los Santos recordó este sábado otro dato que puede tener interés: es la misma familia que está vinculada a las huertas comunitarias que promueve la Municipalidad en la zona de Ayolas y Circunvalación, muy cerca de donde apareció la pintada pidiendo la libertad del fundador de "Los Monos".

En mayo de 2018, resultó asesinado Juan Carlos Pucheta, en pasaje Page y Grandoli. Según testimonios de vecinos, se dedicaba a embolsar harina en una fábrica de Grandoli y Centeno. Un año después, se imputó a otro integrante de la familia, Damián, por un doble homicidio ocurrido tiempo antes contra gente que cenaba sobre la vereda en Seguí y Grandoli.

Ese ataque había sido el 1 de enero de 2018, con Luis Tourn y Sofía Barreto como víctimas y dos heridos. Según la investigación, los disparos no buscaban a las víctimas sino a alguien que había salido de la cárcel pocas horas antes, pero que no estaba ahí. En marzo de 2020, los Pucheta volvieron a ser noticia en las páginas policiales, porque Cristian fue baleado desde un auto en el Bajo Ayolas. 

El mismo investigador que aportó la información sobre la pintada que abre esta nota, brindó un dato más: "También se dice en la calle que fueron los Pucheta quienes robaron el teléfono de Justina Pérez Castelli, el día del homicidio de Medina". La referencia es del doble homicidio de 2013 en cercanías del Casino City Center.