El empresario santacruceño Lázaro Báez afirmó que el dinero que se contó en la ex financiera SGI era para un emprendimiento inmobliiario, en un escrito presentado ante el juez federal Sebastián Casanello, y se negó a responder preguntas.

Tras la declaración indagatoria, el magistrado dispuso que, tanto él como su contador Daniel Pérez Gadín, queden detenidos y sean trasladados a la cárcel bonaerense de Ezeiza, informaron a Télam fuentes judiciales.

Báez sostuvo que ese dinero, calculado en unos cinco millones de dólares, estaba destinado a la compra de un campo en una localidad bonaerense, informaron fuentes judiciales.

Además, en los escritos, se cuestionó la validez legal, como prueba, del video filmado por una cámara de seguridad en la financiera ex SGI, conocida como La Rosadita, en Puerto Madero.

En tanto Martín Báez tuvo que fijar un domicilio de residencia en Capital Federal e informó que vivirá en un departamento de un barrio del norte porteño.

El presidente de la empresa de aviones privados Top Air, Walter Zanzot, también se negó a responder preguntas y en un escrito dijo que "solía acompañar a Martín Báez a distintas oficinas de Capital Federal", en un proceder que era su costumbre también con otros clientes de la empresa "que requerían sus servicios", según las fuentes.

El ex titular de SGI, tras la salida de la financiera de Federico Elaskar, César Fernández, se negó a prestar declaración indagatoria.

Por su parte, Elaskar, concurrió a los tribunales federales de Retiro para ampliar su indagatoria ante Casanello, trámite que cumplió al responder algunas preguntas y entregar un escrito.

Para mañana está prevista la indagatoria del hijo del contador de Báez, Ariel Pérez Gadín y para el viernes las de Leonardo Fariña y Fabián Rossi.

Este último es uno de quienes aparece en el video al igual que Ariel Perez Gadín, junto a Martín Báez, Zanzot y Fernández.

Lázaro Báez y Pérez Gadín fueron detenidos ayer por Casanello cuando arribaron desde Santa Cruz al aeródromo de San Fernando.

Ambos pasaron la noche en una dependencia de la Policía Federal y a las 7 fueron trasladados a Comodoro Py 2002.

Báez pudo reunirse con su hijo Martín en la alcaidía antes del inicio de las indagatorias y recibió un bolso con ropa por parte de este.

Poco después de las 10, Martín Báez inició su indagatoria con el juez en el cuarto piso, luego fue el turno de Pérez Gadín, de su padre Lázaro Báez, Zanzot, Fernández y Elaskar.

(Fuente: Télam)