El expiloto de Fórmula 1 y actual empresario frigorífico  Oscar “Poppy” Larrauri enfrentó este jueves una audiencia imputativa en Rosario en la que se lo acusó de lavado de dinero proveniente del juego clandestino, en la causa de alto impacto en la que ya fueron detenidos y separados de su cargo dos fiscales rosarinos.

La audiencia acusatoria estuvo encabezada por los fiscales Luis Schiappa Pietra y Matías Edery, quienes investigan una red de juego clandestino con conexiones judiciales y políticas.

Por eso los fiscales ponen la mira en la figura de asociación ilícita, en el que se develaron muchos nombres involucrados como el abogado José Fernández Chemes, exsecretario de la Municipalidad de Villa Gobernador Gálvez.

En tanto, a Larrauri, quien también fue concejal de la ciudad de Rosario, lo acusan por presunto lavado de dinero obtenido por el jefe de una asociación ilícita dedicada a la explotación ilegal de juegos de azar, Leonardo Peiti.

Además, quedó ligado al caso por la presunta compra de una serie de terrenos en el Gran Rosario que habría adquirido, de acuerdo a la investigación, con recursos vinculados a la banda de Peiti.

La residencia de Larrauri en el Country Golf Rosario del barrio de Fisherton fue allanada por orden de los fiscales en febrero último, para buscar documentación relativa a la pesquisa. Nunca hubo orden de detención del empresario.

En la audiencia de este jueves, tanto Peiti como Fernandez Chemes fueron acusados de los delitos de lavado de dinero y estafa procesal contra el juez del trámite en tanto que Larrauri fue imputado de lavado de dinero.