Una pequeña sala del primer piso del Centro de Justicia Penal de Rosario fue el escenario para la audiencia que habían solicitado los abogados defensores del financista Patricio Carey, para pedir a la justicia que archive la causa en su contra. Se realizó este jueves y duró casi cuatro horas. La investigación con la que se llegó hasta aquí se abrió hace más de un año, cuando se detectó que Cofyrco -de la cual el acusado era propietario junto a otros socios- le había vendido dólares a un narcotraficante que no registraba ingresos lícitos y haber tenido en una oficina de la financiera 174 DNI con los que se habían hecho operaciones cambiarias sin que sus verdaderos titulares de los documentos lo sepan, buscando favorecerse con el.valor de la divisa en el mercado paralelo.

Los doctores Oscar y Walter Stramazzo mantuvieron una batalla dialéctica con la Unidad de Delitos Económicos, representada por el fiscal Sebastián Narvaja. Y aunque se esperaba que haya una respuesta al pedido que hacían ambas partes (sobreseer a P. Carey o confirmar que irá a juicio), se decidió pasar a un cuarto intermedio por ocho.días. Quien deberá resolver es la jueza Melania Carrara, aunque en virtud de los elementos conocidos este mediodía, quedó flotando la sensación que será difícil lograr el cierre de la investigación y desvincular a al acusado de los hechos.

Es que Narvaja no sólo detalló cómo había sido la operación realizada en septiembre de 2020 por el narco Marcelo “Coto” Medrano en Cofyrco, cuando compró dólares por más de 2 millones de pesos, sino que brindó abundante explicación sobre el manejo ilegal de la financiera en todas sus actividades y refirió a testimonios aportados como prueba a la causa que dan cuenta de que Patricio Carey no cumplía un rol secundario en la firma, sino que era uno de sus jefes y dueños, junto a Fernando Vercesi.

La estrategia del fiscal fue mostrar que más allá de los dos hechos que se pretenden llevar a juicio, había en los actores acusados un modus operandi vinculado a la ilegalidad. Y plantear -de algún modo- que la decisión de la jueza sobre este caso puede sentar un precedente a la hora de perseguir las conductas delictuales del sector financiero local en relación a las maniobras de lavado de dinero de origen ilícito.

La causa, cabe recordar, se inicia tras el cruento asesinato de Medrano frente a una estación de servicio YPF en Granadero Baigorria. Allí lo había citado por una persona que conocía, porque cerca de las 19 ha bajó de su auto sin tomar recaudos. Pero resultó ser una emboscada fatal y fue ejecutado en la calle. Tras la ejecución, los fiscales que investigan el crimen pudieron abrir su teléfono y comprobaron que ese mismo día la víctima había comprado varios miles de dólares en Cofyrco. Uno de los titulares de la firma, con oficinas a pocos metros de la Bolsa de Comercio, era Patricio Carey, quien hoy pidió desvincularse del tema, por haber sido en los papeles de la empresa, apenas su director suplente.  

La voz de la defensa

Los doctores Oscar y Walter Stramazzo, padre e hijo, estuvieron todo el tiempo contrariados, entendiendo que la Fiscalía de algún modo perseguía sin razones a su defendido. “Desde que pasó esto, ha tomado repetida exaltación en la prensa el apellido Carey. Se lo ha ensuciado y se ha vinculado el apellido a temas como el narcotráfico y el lavado”, se quejaron los letrados, casi como si la acusación de Narvaja se diese por un capricho del fiscal o una especie de bullying contra el titular de Cofyrco, sin justificación punitiva.

Stramazzo padre ensayó una defensa ciertamente sui generis de Carey, jugando con la idea de que “mal de muchos, consuelo de tontos”. Dijo: “Todos conocemos a alguien que fue a comprar dólares por fuera del sistema financiero oficial” y añadió: “El 10 de diciembre de 2020, la investigación encuentra que un señor Medrano, ya fallecido, había comprado dólares en Cofyrco. Ese hecho es incontrovertible. Pero la pregunta es: si alguien va y compra dólares llevando pesos, ¿eso es lavado de activos? Para nosotros, no. En todo caso, si las transacciones se repiten es un delito de operaciones financieras no permitidas, que es una causa federal”.

Antes, su hijo Walter había intentado desligar a Patricio Carey de las maniobras con los 174 DNI que se encontraron al allanar Cofyrco, que estaban en una bolsa y habían sido perdidos en la barra de los boliches de La Fluvial. Con esos documentos, se compraban dólares en el mercado legal a precio oficial y luego eran reubicado en el mercado negro por la financiera, con distintas actividades que explicó Narvaja.

“Hay prueba objetiva que demuestra la inocencia del señor Carey. Los dueños de los DNI perdidos dicen no conocerlo. Vercesi dijo en noviembre de 2021 que se sorprendió al ver esos documentos y que hasta pensó que los había plantado la policía. Después, explicó que los había traído Fracassi, porque trabajaba en un boliche. Respecto a que el lugar donde aparecieron, que para el fiscal era la oficina de Carey, lo desmiento: era una oficina de uso común”, planteó el más joven de los Stramazzo.

El turno del Fiscal

Con una fuerte solidez argumental, el fiscal tomó la palabra después de la defensa. Empezó planteando la inconsistencia legal de la propia firma como tal: “Cofyrco no tenía registrada operaciones en IVA ventas. Pero tenía 200 metros cuadrados en pleno centro, en Corrientes y Córdoba. Había contratado a una arquitecta y un diseñador de marca, que declararon en la causa y explicaron que se les pidió preparar la o con amueblamiento de primera calidad. Trabajaban unas 10 personas todos los días, sin estar registrados en ningún lado. No había actividad lícita visible que permita costear los costos de funcionamiento de la empresa”.

Luego, habló del sponsoreo de Cofyrco de un torneo de Golf en el Country La Rinconada, donde vive Eduardo, el padre de Patricio Carey, que estaba presente en la audiencia. “En el evento había cartelería de Cofyrco y salió reseñado en un suplemento especial del diario La Capital. Aunque no había actividad lícita que explique los ingresos de la firma. Sin embargo, cuando allanaron Edery y Schiappa Pietra, había sumas en pesos, dólares, euros, reales y libras esterlinas”, añadió Narvaja.

Los citados fiscales de la Agencia de Delitos Complejos decidieron en marzo de 2021 un allanamiento hasta Corrientes 732, por los datos que tenían sobre el paso de "Coto" Medrano por allí el mismo día en que fue asesinado. Buscaban documentación que explique la operación cambiaria.

La TOE forzaron el acceso a la financiera en busca de pruebas. Y en este punto, al recordar los hechos, Narvaja reveló datos sorprendentes: “Había un protocolo para los empleados de Cofyrco para actuación en caso de allanamiento. Instruía a salir por la puerta de atrás, retirar bolsos, teléfonos y documentos. De hecho, fue utilizado el día del allanamiento que hicieron Edery y Schiappa Pietra. Patricio salió por atrás y no volvió. Su hermano Eduardo usó la misma puerta para llevarse dos tablets escondidas entre sus ropas. Luego de eso volvió a entrar y se le permitió retirarse”. 

Financista admitió haber vendido dólares a un narco, pero pide ser sobreseído

Luego, en base a testimonios de testigos que declararon en la causa, sumó un elemento que podría complicar más las chances de Carey de quedar desafectado: “La defensa dijo que el acusado era director suplente. En una empresa legal, ese cargo hubiera sido irrelevante a la hora de tomar decisiones. Pero Cofyrco era un nombre de fantasía”, mencionó. Es decir, la hipótesis de Fiscalía es que Carey en los hechos era jefe, más allá de cómo figuraban en los papeles. Y basan su planteo en testimonios de testigos y mensajes de WhatsApp entre socios de la firma. Inclusive podrían aparecer más pruebas, porque hay un teléfono que todavía no se pudo peritar: es el de uno de los socios, del cual su dueño no brindó la contraseña.

Los seudónimos y la plata a los clubes

Otro dato novedoso que aportó Narvaja fue que en Cofyrco, a diferencia de un banco o una casa de cambios oficial en la que se piden datos de AFIP y DNI original, las operaciones se hacían sin ninguna documentación y sin dejar los nombres reales. “Las empleadas declararon que la orden cada vez que ingresaba un cliente nuevo al circuito de cambio de dólares era crear seudónimos a la hora de hacer la operación, para que no queden registrados su nombres verdaderos. Cofyrco lo hacía así, sabiendo que existía un peligro en lo sé hacia y por ende un dolo eventual, señora jueza”, le planteó el fiscal a la doctora Carrara. 

Por otro lado, el fiscal explicó que Cofyrco no estaba inscripta como casa de.cambio, ni ante Banco Central. Tenía cartelería y hacía publicidad engañosa como si fuese una firma habilitada para operaciones financieras, aunque no lo fuera. "En los hechos, era una cueva", razonó Narvaja. 

En otro momento, los abogados de Carey explicaron -insólitamente- que su defendido no podía conocer a Medrano porque “no era futbolero. Es que además de ser narco, "Coto" era uno de los jefes de la barra brava de Newell’s. En rigor, no está probada si la pasión del financista es el golf o el fútbol, pero más allá de sus gustos Narvaja aseguró que los propios empleados de la firma le dijeron que Cofyrco prestaba plata con intereses en negro a NOB y Rosario Central. Y también hay datos de que el propio Carey tenía porcentajes de jugadores. “Ya hemos encontrado la documentación que acredita los préstamos a Central, pero ninguno de esos movimientos estaba declarado ante organismos. Una de las empleadas declaró con temor sobre este tema, planteó que había plata del narcotráfico y que no quería que le pase nada a su familia", soltó el fiscal.

Cuando promediaba la exposición de Narvaja, hubo una nueva queja de la defensa a la jueza por haberle dado mucho tiempo para exponer. El fiscal contraatacó: “Yo puedo hacerla más corta, si los abogados del señor Carey asumen que su defendido era el jefe de la organización investigada. Si no, puedo seguir detallando ante la jueza los motivos por los cuales sostengo que hay elementos para llegar a juicio y no cerrar la causa, como piden ellos”. Como los Stramazzo no aceptaron el convite, Narvaja siguió exponiendo.

Medrano, narco y barra brava: 35 años y ningún ingreso en blanco

Narvaja recordó que cuando "Coto" Medrano fue asesinado, tenía 35 años y un historial económico con el que no podía pasar ni por la puerta de un banco. "No había ganado nunca en su vida un peso de forma legal. La única vez que solicitó un CUIL, fue cuando se lo tramitó el Servicio Penitenciario mientras cumplía una condena federal. Era técnicamente un indigente. Pero llegó con dos millones y medio de peso en la mano a comprar dólares a Cofyrco. Eran 5 kilos de billetes y no había forma legal de explicar esa ganancia", graficó. 

El fiscal fue preparando el terreno para dejar en orsai a los abogados defensores de Carey, que habían iniciado la audiencia tratando de establecer que no había por qué pedirle documentación a alguien que llegaba a comprar miles de dólares. "Medrano tenía antecedentes en narcotráfico, tirando tiros, cometiendo homicidios, negociando con policías corruptos, cobrando por amenazas y numerosas causas en la Justicia. La Fiscalía adelanta también que va llevar a juicio las más de 200 notas periodísticas que daban cuenta al momento de hacer esa operación en septiembre de 2020, que Medrano si siquiera era un simple 'barra brava', sino que era noticia por haber disputado también de forma violenta la jefatura de la misma", le sumó Narvaja. 

En la parte final de su presentación, el fiscal dijo: "Si yo, que gano mi dinero legalmente, iba a Cofyrco y compraba dólares, hubiese cometido también un delito. Ahora, ¿si el dinero para los dólares comprados a Cofyrco habían sido obtenido tirando tiros a una concesionaria? ¿Eso no es darle además una apariencia lícita a dinero partiendo de un delito?", se preguntó Narvaja.

Y continuó con los interrogantes: "¿Qué pasó con los 2 millones y medio de pesos que entregó Medrano? Se podía usar para cambiar un cheque, para otorgar un préstamo con interés no declarado, para que alguien llegue por ejemplo a pagar una cuota de la tarjeta. Y así, la montaña de plata que dejó un narco, podía terminar en las manos de alguien pagando la cuenta del supermercado o como fondos para pintar la tribuna de Newell's. Por eso la teoría de Fiscalía es que hay que seguir toda la ruta: cómo se obtenían los pesos que llevó 'Coto' Medrano y para qué se los usaba en operaciones habituales en Cofyrco.  Además, cómo eran obtenidos esos dólares que él se llevó".

El momento final de Narvaja fue cuando anunció que haría dos citas: "Una es reciente, de algo que dijo acá mismo el doctor Stramazzo, que se preguntó qué podía hacer su cliente, si podía pedir antecedentes al hacer esa operación. La respuesta es clara, es 'sí'. Si usted va a un banco y deposita por ventanilla 2 millones y medio de pesos, tiene que explicar de dónde salió esa plata. Cofyrco no preguntaba y cobraba por no preguntar".

La segunda cita del fiscal fue un mensaje de WhatsApp que se ofreció como prueba: era de Patricio Carey diciéndole a otro de los integrantes de la financiera, dando una orden clara respecto a qué tipo de cuidados había que tener en el mercado de cambios ilegal, en un momento en el que era bajo el spread (la diferencia entre la punta vendedora y la compradora). En esa conversación, Carey decía: "Agarrá lo que venga". 

Esa instrucción, fue cumplida. Y todo quedó a la vista por las balas que ingresaron a la humanidad de Medrano y ese teléfono suyo que quedó tirado en el pavimento, en septiembre de 2020. Sin proponérselo, el sicario que asesinó al narco y barra de Newell´s, permitió que los fiscales tiren del hilo. Así, se abrió una investigación que está corriendo el velo a la aceitada relación entre las bandas criminales y algunos actores acomodados de la Rosario elegante, sin tapujos a la hora de hacer negocios con la renta que deja el narcotráfico y la violencia que azota a la ciudad cuando en los barrios se disputa el territorio para la venta de droga.

Finalizada la larga alocución de Narvaja, ya eran casi las tres de la tarde. La audiencia había comenzado a las 11. Por ello la jueza solicitó a las partes tener a bien hacer un cuarto intermedio, que pidió no sea de más de diez días. En menos de dos semanas, el debate debe continuar.