En el arranque de la séptima semana del juicio contra Esteban Alvarado y otras seis personas, acusadas por dos homicidios, balaceras y hechos de asociación ilícita, declaró uno de los imputados: Miguel Greci Hazzi, maestro mayor de obras y empresario de la construcción, que se sospecha lavó dinero de la organización. 

Según la acusación de los fiscales Edery y Schiappa Pietra, junto a su mujer Damiana Girardi -modelo y relacionista pública- colaboraron en el armado de la estructura económica de Alvarado. Este lunes, el propio Greci Hazzi pidió declarar y dio varios nombres de empresarios con los que hizo negocios en estos años.

En su relato, el imputado Greci Hazzi hizo varias alusiones a Lucio Maldonado, el prestamista informal que fue asesinado a fines de 2018. Y de cuyo homicidio se acusa a Alvarado y otros hombres en este juicio. Según el constructor, cuando "los avatares de la economía argentina lo dejaron en mala situación", necesitó recurrir a él para gestionar préstamos en el mercado negro. "Yo cambiaba cheques en la calle. Uno de los que me levantaba cheques era Lucio Maldonado. A veces cuando se demoraba un pago por atraso en la certificación de una obra, él me adelantaba dinero", dijo. Al mismo Maldonado, reconoció Greci, tuvo que darle un Audi A4 y una lancha semilla rígida suya, en parte de pago por deudas asumidas con el prestamista.

La declaración de Greci Hazzi fue larga y por momentos se fue en detalles de temas irrelevantes para el juicio, como el debate por si era más conveniente la construcción con ladrillos o en durlock. "A mi defendido se lo acusa de haber sido parte durante siete años de una asociación ilícita. Por eso necesita dar todas estas explicaciones para saber su realidad patrimonial", sostuvo su abogado ante los cuestionamientos de Fiscalía. 

En este marco, Greci Gazzi contó cómo conoció a Alvarado. Según su versión, fue en un cumpleaños de una de las hijas de Jorge Benegas, integrado económicamente a la organización que enfrenta el juicio. "Fue en un pelotero en Fisherton, donde conocí a Esteban y a su señora Rosa Capuano. Pero el lugar de visita casi a diario que tenía Alvarado a su amigo Benegas era en la obra en la Garita 15, en la casa que se estaba haciendo Benegas. Todos los viernes caía a comer el asado. A él no le gustaba mi sistema de construcción en seco. Él se había criado con paredes de 30 y no le gustaba el durlock. De eso hablábamos mucho", recordó Greci Hazzi.

Según su relato, la mayoría de las puertas que se le fueron abriendo para hacer algún trabajo u operación comercial, se fueron dando en base a contactos casuales. Así, por ejemplo, relató un dato bastante particular: casi sin conocerlo, terminó como invitado en el casamiento del Jefe de Drogas Peligrosas, Javier Makhat.

“En un momento me viene a ver Makhat. Me cuenta que había comprado un terreno en Puerto Roldán, que miraba al oeste. Él me cuenta que se estaba por casar con una doctora y que tenían una casa en Funes. Y me invitó a su casamiento, teniendo muy poca relación. Porque yo le había hecho un proyecto de fachada para esa casa”, aseguró.

Makhat, cabe recordarlo, era el policía que a fines de 2018 estaba viviendo en el departamento de Condominios del Alto cuando las TOE llegaron a allanarlo. En esa misma propiedad, había vivido Alvarado junto a su familia cuando sospechaba que su ex socio Luis Medina podía llegar a matarlo. Y las expensas, llegaban a nombre de la mujer de Greci Hazzi, que era el dueño en los papeles.

Para los fiscales, la declaración estuvo llena de contradicciones. Y postergaron para este martes las preguntas que harán al constructor. Entre otros interrogantes que surgieron al escucharlo, quedó la duda por el origen de un patrimonio que le permitía comprar terrenos en Roldán o un departamento en Condominios del Alto, al mismo tiempo que decía estar levantando deudas con el prestamista asesinado, Lucio Maldonado.