El único sospechoso por el crimen de Esteban Brian Fernández, el trabajador del supermercado La Reina que resultó muerto hace una semana cuando se resistió al robo de su bicicleta, fue imputado este viernes y quedará en prisión preventiva por el plazo de ley. Se había entregado a la justicia el último martes, luego de que vecinos lo sindicaban como autor del hecho. Si bien su pretensión en primera instancia desligarse del crimen, la fiscal Georgina Pairola solicitó dejarlo en la cárcel mientras avanza la investigación.

En torno a las pruebas que señalaban a J.M como el autor del hecho, Pairola explicó que fue clave la ronda de reconocimiento de diversos testigos, imágenes de las cámaras de seguridad y manchas de sangre detectadas con luminol en la ropa que le encontraron al hombre que se entregó ante la justicia. Y aseguró que “las prendas que vestía era de similares características, más concretamente una bermuda y unas zapatillas”.

Pairola confirmó que llamó la atención al juez que el hombre se haya presentado por su cuenta -donde se declaró inocente-, y sobre esto explicó: “Su abogado expresa que se presenta porque son los vecinos quienes lo vinculan. Pero en esta investigación entre los testigos no hay vecinos que lo hayan señalado, entonces el juez observó que se trató de una contracción moral de esa persona”. El imputado reside a unas 15 cuadras del asesinato, y por eso la especulación con que haya temido un hostigamiento por parte de los vecinos.

Esteban Brian Fernández fue asesinado en inmediaciones del Boulevard 27 de Febrero e Iriondo, el viernes 20 de enero por la noche, cuando volvía de trabajar. Iba por la bicisenda cuando fue abordado para quitarle su bicicleta. Y al resistirse, fue apuñalado. El presunto autor, se supo hoy, vivía a pocos metros del lugar.

Entre las pruebas, la fiscal destacó que “tanto en los videos como los testigos observaron cierta dificultad del agresor para correr, lo que coincide con pruebas físicas que se realizaron al imputado, y se encontró una escoriación en una rodilla que podría haberse realizado en el momento del forcejeo, que se constatará con las filmaciones”.

Sin embargo, en las pruebas del cuchillo en el lugar del hecho “no se encontraron huellas dactilares, y no se hallaron cuchillos similares en el allanamiento en su hogar”, reconoció.

La fiscal reclamó finalmente en diálogo con la prensa que “si existieran testigos que aún no se presentaron rogamos se acerquen a dar testimonio para esclarecer el caso”, y confirmó que el imputado tiene un antecedente en trámite de un delito contra la propiedad.

En la previa de la audiencia, que se hizo este viernes a media mañana en el Centro de Justicia Penal, hubo una movilización de familiares suyos y compañeros de trabajo en reclamo de que la Justicia avance en el caso.