La Justicia condenó a Brian Ibarra a 20 años de prisión efectiva por el homicidio de Ticiana Espósito ocurrido el 14 de septiembre de 2020 cuando la adolescente de 14 años, hija de un policía, se encontraba en el interior de su vivienda en barrio Villa Urquiza. Además, en el marco de la investigación, se condenó a otras dos personas, entre ellas a un taxista que habría servido como transporte del homicida. 

Los jueces Suárez, Marcogliese y Becerra resolvieron homologar el procedimiento abreviado luego del acuerdo arribado entre el fiscal Ademar Bianchini, y la defensa de Ibarra, quien aceptó confesar su culpa y asumir una condena a 20 años de prisión efectiva.

Ibarra, de 27 años de edad, carga con el delito de "Homicidio agravado por el uso de arma de fuego, Portación ilegítima de arma de fuego de guerra, Tenencia ilegal de arma de guerra y Encubrimiento agravado por ánimo de lucro". 

Por otro lado, se condenó al taxista Gustavo Marcelo Borda, de 51 años, a la pena de 5 años y 6 meses de prisión efectiva por el delito de "partícipe secundario de Homicidio agravado por uso de arma de fuego", unificándose con una condena anterior -en Victoria, Entre Ríos-, siendo la pena única de 6 años de prisión efectiva.

Por último, condenaron a Alex Gabriel Ibañez, de 22 años, a la pena de 3 años y 6 meses de prisión efectiva por los delitos de "tenencia ilegal de arma de fuego de guerra y encubrimiento agravado por ser el delito anterior particularmente grave". Esto se unificó con una condena anterior sindo la pena única de 4 años de prisión efectiva. 

Los hechos

La Fiscalía le atribuyó a Ibarra haber sido co-autor del homicidio. El día del crimen, tras acordar deliberadamente entre el condenado y otra persona un plan delictual y el rol que cada uno tendría en el mismo, se reunieron ambos en la esquina de calles Magallanes y Virasoro, y caminaron hacia calle Gálvez.

Al llegar a la altura del 2700, esgrimieron armas de fuego y realizaron al menos diez disparos contra una vivienda. Adentro estaba la adolescente en la tarea de lavar los platos. Uno de los disparos le acertó en la cabeza. Familiares llevaron a la nena hasta el Heca, donde falleció a poco de arribar. 

Luego de los disparos, ambos fugaron a la carrera por Magallanes en dirección a Gálvez, para luego subirse a un taxi conducido por Gustavo Borda, quién los aguardaba a la vuelta.  A este último se le imputó el haber formado parte del plan criminal que tenía por objetivo matar una persona que habitaba en la zona de calle Magallanes al 2700.