El pasado domingo fue una jornada desafortunada en materia de seguridad para la ciudad de Rosario, porque al feroz ataque que terminó con la vida de una mujer embarazada, y dejó a su hija de nueve años malherida, se sumó otro ataque a balazos en el que un chico de once resultó herido.

El menor jugaba a un partido de fútbol en la canchita del barrio cuando un automóvil, del cual se preservan las características para la investigación, pasó, y desde dentro se efectuaron los disparos, consignó el MPA a Rosarioplus.com.

Esto fue pocas horas antes del otro hecho, en Somoza y Joaquín Suárez de barrio La Cerámica al atardecer. En circunstancias que aún se investigan el pequeño fue herido de una bala en una pierna y sufrió una fractura expuesta por el balazo, y su estado es reservadoe.

Un vecino del menor lo llevó malherido en su vehículo cuando cruzaron a un patrullero policial, al que dieron cuenta del ataque, y los efectivos se ocuparon de abrir camino para ingresar al pequeño al hospital de Niños Zona Norte.

Otra vecina que presenció el ataque relató en el móvil de Sí 98.9 que "los disparos vinieron de afuera cuando un grupo de chicos jugaba al fútbol en una canchita, estaba llena de gente, hacían un torneo de fútbol como siempre", y aseguró que "ahora que cerraron el destacamento, esta zona es tierra de nadie".

Investiga Unidad de Flagrancia, que comisionó al Gabinete criminalístico para relevamiento de la escena del hecho, toma de testimonios y levantamiento de rastros. En principio no habría cámaras en la zona.