La fiscal que investiga la actuación de los policías de la comisaría 10ª el día en el que la bibliotecaria María de los Angeles Paris murió en esa seccional contradijo la versión de la familia de la mujer. Karina Bartocci, de la Unidad de Violencia Institucional del Ministerio Público Fiscal, dijo que "ninguna de las pruebas fundamentales para la Fiscalía se ha perdido", y ratificó que la muerte de Paris no fue por causas violentas.

La fiscal Bartocci brindó este viernes una conferencia de prensa para salir al cruce de lo manifestado por familiares de la bibliotecaria, quienes sostienen la sospecha de que ella fue sometida a golpes y maltrato en la seccional policial de Darragueira al 1100, en Alberdi, y que interpretan una presunta complicidad entre la actuación fiscal y la Policía provincial.

"La primera autopsia indicó que el fallecimiento no fue una muerte violenta, sino que se debió a un paro cardíaco, no por una acción violenta", dijo la fiscal. Ella considera como pruebas vitales de la investigación las imágenes de las videocámaras de la seccional y de la cochería mortuoria que está sobre la vereda de enfrente, y "más de veinte entrevistas" a vecinos, personal de la sala velatoria y concurrentes de velatorios realizados el día que Paris llegó y entró a la seccional. 

"Todo indica que María de los Angeles entró a la comisaría en un cuadro de desorientación, y luego de unos minutos motivó que el personal de la comisaría la tomara por la fuerza y la reingresara a la comisaría, donde se produjo el deceso. Es esa conducta la que se está evaluando: si los policías actuaron acorde al cuadro que estaban presenciando o si se excedieron", distinguió Bartocci.

La fiscal recalcó que "las conclusiones de la autopsia no permiten inferir que el deceso sea por lesiones u otra patología. No hay golpes. Sí debo aclarar que hay hematomas en brazos y piernas, pero sobre estas lesiones no se puede concluir que hayan sido causadas por una golpiza, sino que pueden ser por agarres (sic) o por ese comportamiento que ella presentó previo a su fallecimiento dentro de la comisaría", dijo la funcionaria en alusión a la posible alteración emocional en la que los testigos dijeron haberla visto aquel jueves 3 de mayo.

Mientras tanto, la fiscal aguarda el resultado de un peritaje toxicológico encomendado a un laboratorio platense. Luego de eso, se realizará la segunda autopsia que solicitaron los familiares querellantes. Esa tarea se le asignará a una perito forense -Bustos-, dependiente de la Corte Suprema de Justicia de la Nación. 

Bartocci destacó que, ante el cuestionamiento elevado por la querella al resultado de la autopsia, ella puso ese peritaje en consideración del Equipo de Antropología Forense, organismo que ratificó que no hubo defectos ni anomalías. 

"De todos modos, el juez ordenó que se repita la autopsia, y así se hará", concluyó la fiscal.