Juan Pablo Escola, segundo jefe del Escuadrón 36 de Esquel de la Gendarmería Nacional, fue quien encabezó el operativo en la comunidad mapuche Cushamen, el 1 de agosto pasado, y que derivó en la desaparición del joven Santiago Maldonado. El gendarme habló por primera vez y para contar su versión eligió al diario Clarín. Dijo que duerme tranquilo y que “no estuvimos ni cerca de detener a alguien”.

Afirmó que en ningún momento del operativo los gendarmes estuvieron "a menos de 40 metros" de la comunidad mapuche, que los agentes de esa fuerza de seguridad no llevaban "armas 9 milímetros" y que "ningún arma de guerra fue usada".

Escola dijo también que "no estaban las condiciones para detener a uno de ellos", al salir al cruce de testigos que dijeron haber visto cuando Maldonado era apresado por gendarmes a la vera del río Chubut.

"No ocurrió; no estaban las condiciones para detener a uno de ellos", afirmó Escola, quien sostuvo que los gendarmes quedaron "a varios metros de la costa del río" y no llegaban a ver dónde se encontraban las personas de la comunidad.

"Quedamos a varios metros de la costa del río, pensé que podían sorprendernos, no los veíamos. No alcanzamos el río. Ordené el repliegue hasta la zona de la casilla", apuntó el segundo jefe del Escuadrón de Esquel.

Señaló que no vio que "nadie se quedara retrasado" durante el repliegue de los gendarmes, que luego comenzaron a "labrar el acta con lo actuado" y "nada extraño ocurrió".

"En la tranquera pusimos pusimos a cuatro o cinco personas, algunas gendarmes mujeres hablaron con representantes de derechos humanos. Nadie nos preguntó por Maldonado, y eso que estuvimos ahí cinco horas o más", subrayó.

Santiago Maldonado permanece desaparecido desde el 1 de agosto pasado. Testigos aseguran haberlo visto por última vez durante un operativo que Gendarmería realizó ante una protesta de la Pu Lof en Resistencia de Cushamen, que reclama la devolución de tierras.

Tanto la familia de Maldonado como las organizaciones de derechos humanos, políticas y sociales apuntan contra la Gendarmería por la desaparición del joven. Y el viernes, un mes después del hecho, las manifestaciones se multiplicaron en todo el país.