La justicia rosarina desestimó el pedido de prisión domiciliaria solicitado por el abogado de Priscila Denoya, acusada de ser instigadora del crimen de Marcos Guenchul, y la ex pareja del entrenador seguirá transitando la detención preventiva en la cárcel.

El defensor de la joven, Fausto Yrure, había solicitado una audiencia para pedir la prisión domiciliaria, lo que generó molestia e indignación en los allegados a la víctima. El argumento del letrado hacía hincapié en la maternidad de la mujer, que tiene un bebé de pocos meses y una niña de tres años (hija de Guenchul). 

"El derecho del niño era estar en un lugar sano, y no en compañía de gente que le hace mal", afirmó Marcela Ontiveros, madre de Marcos, luego de conocer el rechazo de la justicia al pedido de la defensa de la joven. "Solamente con su familia paterna va a tener un vínculo de amor", agregó. 

En cuanto a la situación de la menor, la abuelo manifestó: "Cuando sea más grande va a saber la verdad, que ella mató a su padre".

El entrenador asesinado en Sucre y Mendoza mantenía un vínculo tenso con su ex pareja, puntualmente por la hija que tenían en común. Según la familia de la víctima, la joven de 32 años no le permitía ver a la niña, lo que motivaba discusiones y el mal vínculo entre ambos.

Por el crimen de Guenchul se encuentran detenidos Maximiliano Panero, presunto autor material del asesinato, Caio Soso, quien manejaba el vehículo que se utilizó el día del ataque, y Priscila Denoya, acusada de ser instigadora del hecho.